El servicio de Inspección Tributaria del Departamento municipal de Hacienda recuperó en 2010 un total de 3,5 millones de euros correspondiente en su gran mayoría a fraude fiscal. La mayor cantidad de dinero estaba relacionada con el Impuesto de Construcciones, Instalaciones y Obras: dos millones de euros. "La labor del servicio de Inspección Tributaria permite que, al final, pague quien tiene una obligación con el Ayuntamiento", señala la edil de Hacienda, Marian Gutiérrez.