vitoria. Es 2011 en Vitoria capital. Un año menos en sus concejos. Basta una lectura al Presupuesto actual (el de 2010) para entender por qué la zona rural del municipio se siente abandonada por el Ayuntamiento gasteiztarra. Las obras integrales iniciadas hace pocos meses en Miñano, Guereña y la plaza de Mendiola corresponden en realidad a 2009. La partida de 500.000 euros reservada en este ejercicio para seguir con las reformas gordas en los pueblos que se mueren de viejos ni se ha tocado, mientras en la ciudad se habla de auditorio y soterramiento.
Y lo mismo ha sucedido con cuantías menores referidas a otros proyectos. Todo el dinero del Consistorio destinado a los concejos, a excepción del reservado para las actuaciones elegidas por ellos mismos, sigue en las arcas.
En cifras, la situación es la siguiente. De los 1,2 millones comprometidos en el Presupuesto de este año para los concejos del municipio, se han quedado sin materializar 768.042 euros. Para empezar, esto significa que el Ayuntamiento no ha ejecutado la partida de 500.000 euros destinadas a las obras integrales, ni la de 24.000 que se previó para el estudio de gasificación de la zona rural, ni la de 35.000 para tratamientos silvícolas, ni la de 30.000 reservada para la apertura de nuevas pistas forestales, ni la de 20.000 para la creación de parques, ni los 50.000 de reforestaciones.
La partida aprobada para la colocación de juegos infantiles en los pueblos, 50.000 euros, sí se ha activado, aunque no brille a pie de calle. El Ayuntamiento sólo ha redactado los proyectos de Ullibarri Viña y Foronda, así que para la instalación de los toboganes y columpios habrá que esperar al año nuevo. Al menos, el apartado de obras elegidas por los concejos -el presupuesto participativo del departamento de Vía Pública- ha corrido un poquito más de suerte. De los 500.000 euros establecidos en las Cuentas, 440.958 han echado a rodar: se han contratado los trabajos de bacheos en Mendiola, Bolívar, Eskibel y Castillo, está prevista la adjudicación de luminarias en once pueblos, y se ha completado la instalación de bancos prevista.
Por lo demás, toda acción registrada en la zona rural ha sido posible con cargo al Presupuesto de 2009. El Ayuntamiento ha dado luz verde a la colocación de nuevo alumbrado en nueve pueblos, ha adjudicado las obras integrales de Miñano Mayor, Guereña y la plaza de Mendiola (4,1 millones) y ha instalado juegos infantiles en Arkaia y Mendoza.
Ante este panorama, la asociación de concejos de Vitoria ha recibido con escepticismo las promesas para el año que viene. Las Cuentas de 2011 contemplan una experiencia piloto de transporte público -a la espera del estudio de movilidad de la zona rural prometido por el gobierno hace dos años y del que nada se sabe-, la primera fase de un plan de señalética, la mejora de los medios destinados al Plan de Nevadas y partidas para obras en pueblos, fosas sépticas, juegos infantiles, pistas y cortafuegos... "Mantenemos los recursos suficientes para continuar el programa de actuaciones y se comprometen hasta 3 millones de euros para los siguientes ejercicios y así garantizar actuaciones e inversiones", destacó el edil de Zona Rural, Peio López de Munain, en el debate presupuestario. La asociación de concejos, sin embargo, ha perdido la fe.