Vitoria, 9 ago (EFE).- Celedón despedirá esta próxima madrugada las fiestas de Vitoria con su vuelo de regreso a la torre de la Iglesia de San Miguel, tras seis días en los que los blusas y las neskas han amenizado las celebraciones en honor a la Virgen Blanca.
La jornada de hoy ha amanecido gris y fresca, con las calles casi vacías de gente por el cansancio acumulado durante todas las fiestas y con escaso público en las actividades programadas para los más pequeños.
Las bandas de gaiteros, txistularis y trikitilaris han esperado al mediodía para empezar a amenizar a los vitorianos que han querido agotar hasta el último día festivo, ya que la mayoría de los visitantes que llenaron la ciudad durante el fin de semana ya se han ido y muchos alaveses también han preferido marcharse de vacaciones.
El lehendakari, Patxi López, ha cumplido su promesa de participar en las fiestas de las tres capitales vascas y hoy también se ha dejado ver en Vitoria.
Gigantes y cabezudos, fanfarres y conciertos musicales han dado paso a los dos actos que han atraído a más gente: la exhibición de arrastre de piedra con bueyes y la actuación de bertsolaris, a cargo de Ander Solozabal, Unai Iturriaga, Maialen Lujambio, Igor Elortza y Jone Uria.
Ya por la tarde, el paseíllo a los toros volverá a animar las calles céntricas de Vitoria, antes de la sexta y última corrida de estas fiestas, con los rejoneadores Fermín Bohórquez, Pablo Hermoso de Mendoza y Diego Ventura.
Los que no acudan al coso taurino podrán apurar las últimas horas de fiesta con bailables, reirse con la actuación de África Luca de Tena titulada "Que yo tenga que hacer esto..." o reponer fuerzas con la degustación de pinchos de pollo de caserío y de bonito del norte con "Eusko Label" asados a la parrilla.
Antes de que las cuadrillas regresen de la plaza de toros comenzará la representación teatral "Brokers" de la compañía Yllana, y, ya por la noche, tendrá lugar la esperada final del partido de pelota, que disputarán Xala y Barriola contra Titín y Zubieta, después de que los dos primeros lograran el sábado batir a los favoritos, Irujo y Beloki.
Los fuegos artificiales, los toros de fuego, fanfarres y orquestas alargarán la noche hasta que a la una de la madrugada Celedón se despida de los vitorianos con su ascenso a la torre de San Miguel, de donde bajó volando el pasado miércoles y desató la alegría de las miles de personas que esperaban desde hace un año las fiestas de La Blanca.
Con su marcha, la ciudad recuperará la calma y pasará el testigo a la capital donostiarra, cuya Semana Grande arranca el próximo sábado día 14. EFE
