vitoria. El Casco Medieval alumbrará muy pronto una nueva noche, con menos derroche energético pero sin puntos ciegos ni viviendas invadidas por el brillo de las luminarias. Zapatería es la prueba. Desde hace unos días, la calle acoge cinco tipos de faroles diferentes en su estética pero con los mismos beneficios. Cuál será el definitivo dependerá, en gran parte, de los vecinos. Por ahora, han sido alrededor de cien los gasteiztarras que han opinado a través de los cuestionarios repartidos por los centros cívicos de Aldabe y El Campillo, y la Plaza Nueva. Y, de momento, una cosa está clara: la opción de las farolas que recorren la espina dorsal de las calles sujetas por cables aéreos -la que se ha colocado entre el cantón de la Soledad y Carnicerías- ha quedado completamente descartada.

Los vitorianos prefieren las farolas adosadas de estilo moderno, que se encuentran entre la Virgen Blanca y el cantón de la Soledad, y las luces leds, ubicadas en el último tramo de la calle, cerca ya de Aldabe. Ambas modalidades lideran la lista de preferencias de luminarias probadas en la vía, que se completa con las de aire contemporáneo y las actuales -mismo farol, distinta bombilla-.

La campaña participativa finalizará el próximo día 12. Y, para entonces, la Agencia de Revitalización de la Ciudad Histórica espera contar con miles de opiniones que fundamenten la elección del farol. El pasado martes, la sociedad municipal buzoneó por todo el barrio los mismos cuestionarios que se encuentran en los centros cívicos del barrio y en la Casa Consistorial. "Veremos qué pasa", apuntó ayer el líder de la reactivación del Casco, Gonzalo Arroita, quien insistió en la importancia de sustituir las luminarias actuales.

Su renovación permitirá redistribuir mejor la luz mejorando el rendimiento hasta un 65% "en el peor de los casos" y reduciendo a la mitad el consumo energético y las emisiones de dióxido de carbono.