Vitoria. Dos a cero en la contienda Lazcoz-Maroto. El teniente de alcalde Juan Carlos Alonso convocó ayer una rueda de prensa urgente para desvelar que los tribunales han vuelto a quitarle la razón al PP. El juzgado de lo contencioso-administrativo número 3 ha desestimado el recurso que los populares presentaron en verano por el que exigían la nulidad del contrato del parking de Amárica a la empresa Vinci Park al considerarlo "ilegal". Mal tino el del partido conservador, que en mayo sufrió otra derrota jurídica al archivarse la querella contra el primer edil a cuenta del culebrón de las marquesinas.
Triunfal, pero indignado, el teniente de alcalde recordó las atrevidas declaraciones que pronunció en julio el portavoz del PP, Javier Maroto, cuando anunció su nueva intención de sentar al alcalde en el banquillo de los acusados. Aseguró entonces el concejal popular que el proceso de adjudicación de la obra a Vinci Park "incumplía la legalidad y olía a apaño entre el alcalde y la empresa". Obvió, sin embargo, el origen de la polémica: 48 horas antes de las elecciones municipales, el anterior gobierno del PP contrató a Vinci Park para construir un parking en Renfe a pesar de que la ubicación elegida, con todas las plazas de rotación, podría ser un obstáculo en la futura liberación de los terrenos ahora cosidos por las vías del tren.
Ésa fue la herencia que dejó a Lazcoz, quien siempre había querido un parking mixto en Amárica amparándose en que era lo que demandaban los comerciantes pese a que el Plan de Movilidad no lo aconsejaba y los vecinos lo rechazaban. Lo consiguió porque le vino todo rodado, a través de una sucesión de hechos que para el PP fue siempre sospechosa. Vinci Parki solicitó en julio de 2007 la suspensión de los plazos para levantar el parking de Renfe porque faltaban estudios técnicos, y la Junta de Gobierno -esto es, el PSE- aceptó la petición. En enero de 2008, la compañía presentó un plan de viabilidad para hacer un estacionamiento en Amárica, para lo que alegó escasez de rentabilidad económica del proyecto de Renfe. En abril, el gabinete de Lazcoz anuló el contrato de Renfe e hizo un concurso para la construcción del aparcamiento en la nueva ubicación. Esta empresa se presentó -y lo ganó-, un hecho que para el PP iba "en contra de la ley de contratos, porque las compañías que han participado en la elaboración del pliego de condiciones de los concursos no pueden concurrir a éstos".
La jueza considera que Vinci Park no intervino en esa parte del proceso, sólo en la elaboración del plan de viabilidad. Y eso, afirma, no es motivo de ilegalidad. "Una vez más, un recurso basado en falsedades se archiva", aplaudió Alonso, quien criticó que el objetivo de Maroto era "paralizar la obra y dejar un socavón en el centro". Por eso, solicitó a los populares que "dejen de gastar el dinero público que recibe el grupo en querellas" y les invitó a "arrimar el hombro para trabajar" por Vitoria. El PP, por ahora, guarda silencio.
