- Esther López fue atropellada, pero fue la hipotermia de las horas posteriores lo que causó su muerte. Así lo revela la autopsia cuyo resultado se dio ayer a conocer, que siguen sin esclarecer la autoría de la muerte de la joven, de 35 años, ocurrida en la madrugada del 13 de enero.

Las investigaciones apuntan que la víctima fue atropellada aquella noche cuando deambulaba por el sentido derecho de la carretera en dirección a la localidad y que el impacto fue “a media o baja velocidad”, sin que el golpe, fundamentalmente a la altura del glúteo izquierdo, tuviera entidad suficiente para causar su fallecimiento, producido a posteriori por una posible conjunción de factores como un shock e hipotermia.

Las investigaciones de la Guardia Civil aluden igualmente al hecho de que si el cuerpo de la víctima fue movido, tal circunstancia se habría producido en las horas próximas tras su atropello. Y es que no se descarta que el lugar donde se produjo el impacto fuera otro distinto del escenario donde fue hallado el cadáver.

El levantamiento parcial del secreto de sumario fue acordado este martes por la juez instructora, Soledad Ortega, a través de una providencia en la que también se emplazó al ahora principal sospechoso, O.S.M, a declarar el próximo lunes en calidad de investigado.

Un dato que, entre otros, centra las investigaciones en la persona de Óscar, último que supuestamente la vio con vida aquella noche, es la coincidencia en el hecho de que tanto su teléfono móvil como el de la fallecida fueran prácticamente desconectados de la red en el mismo momento. Figuran también en calidad de investigados R.J.G.F y L.C.G.D, vecinos igualmente de la localidad de Traspinedo.