La aparición de los primeros casos de la variante Lambda en Euskadi -a principios de semana había confirmados dos- ha encendido las alertas y ha obligado a Osakidetza a monitorizar su evolución y analizar su origen para determinar si son casos importados.

No hay que olvidar que en España, a principios de julio se registraron varios brotes en Cantabria en los que estaba implicada esta variante, identificada inicialmente en Perú. Uno de esos brotes notificó más de 90 casos, según un informe del Centro de Coordinación y Emergencias Sanitarias sobre la situación de las cepas en España.

Pero no solo está en el radar de Euskadi, que está haciendo el seguimiento de esta variante con secuenciaciones exhaustivas, también la OMS la sigue de cerca. Porque aunque la mayoría de estas mutaciones del coronavirus no ofrecen alteraciones significativas con respecto a la cepa original, hay que redoblar los esfuerzos a la hora de su detección y estudiar si presentan nuevos síntomas o ver si hay indicios de que pueda volverse dominante.

Séptimo país con más casos

De hecho en España ya se conocen, al menos 105 casos de esta variante y es el séptimo país que más casos ha tenido, por detrás de Chile, Estados Unidos, Perú, Ecuador, México y Argentina. En ninguno de los casos anteriores, según estos datos, la prevalencia de esta variante supera el 18% en las últimas 4 semanas.

La preocupación viene también por que, bajo ciertas condiciones, esta variante del SARS-CoV-2 se ha extendido más rápidamente que la delta aunque no hay una cifra exacta sobre su capacidad de propagación y su letalidad en comparación con otras.

En este momento, en Euskadi, la variante Delta es la predominante con alrededor del 80 o el 85% de los casos. De hecho, ya están contabilizados 14.348 casos de Delta, 740 de la Gamma, 396 de la Beta, 15 de Eta, ocho de Epsilon, dos de Lambda y uno de Kappa.

Además, el crecimiento de la variante Delta ha sido exponencial en muy poco tiempo. Hace mes y medio apenas había 176 positivos detectados de esta cepa y en apenas unas semanas se han multiplicado los casos.

Variante más contagiosa

Las infecciones por coronavirus se han duplicado en el último mes por la variante Delta. El pasado día 30 salió a la luz un documento interno del Centro de Control de Enfermedades de EEUU (CDC, por sus siglas en inglés) que aseguraba que esta variante es más contagiosa que los virus del MERS, el ébola, el resfriado común, la gripe estacional y la viruela, y es tan transmisible como la varicela.

Ha sido la explosión de casos propiciada por esta variante la que ha frenado la desescalada y ha cambiado el curso de la pandemia. También ha desbaratado las expectativas que existían con los planes de la vacunación porque se ha visto que ya no es suficiente el famoso 70% de población inmunizada para garantizar que hay un escudo frente al virus.

Ahora, los expertos creen que no podremos hablar de inmunidad colectiva hasta que el 80 o el 90% de la población total haya recibido la pauta completa o generado anticuerpos por una infección. Y es que los expertos advierten que aparecerán más variantes del coronavirus en la medida en que el virus continúa circulando, se adapta al entorno y cambia para asegurar su supervivencia.

Con la Lambda emergiendo, la sanidad pone el foco en esta mutación andina que se ha convertido en una nueva fuente de preocupación por si pudiera escaparse al efecto de las vacunas.

rebajar la preocupación

Sin embargo, el miércoles la Organización Mundial de la Salud (OMS) rebajó un poco la alerta y aseguró que por el momento no existen razones para que la Lambda pase a considerarse una variante de preocupación. Para la jefa de la célula anticovid de la OMS, María Von Kerkhove, “lo importante de una variante es ver cómo circula y si la transmisión se dispara. Lo que vemos en el caso de la Lambda es que no parece despegar cuando se reporta en un país, incluso en Perú, donde se detectó por primera vez”, señaló.

Sobre sus mutaciones, la epidemióloga reconoció que cada cambio en el virus es inquietante porque podría amenazar la capacidad de las vacunas para funcionar bien, aunque por ahora no se ha visto que esto haya ocurrido con ninguna de las variantes.

La responsable de inmunizaciones en la OMS, Kate O’Brien, aseguró que las vacunas autorizadas siguen mostrando eficacia para todas las variantes que se están siguiendo, en particular a la hora de evitar cuadros graves y hospitalizaciones.

Vigilancia. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha registrado cuatro variantes de preocupación (Alfa, Beta, Delta y Gamma) y cuatro de interés que está vigilando, al igual que otras trece sobre las que ha lanzado alertas. La Delta, llamada antes india, es la dominante en Europa desde finales de julio y fue descubierta en India en octubre de 2020. Cepas como Alfa, Beta o Gamma eran antes denominados como británica, sudafricana o brasileña. Sin embargo la OMS decidió renombrarlas con letras griegas y no por el lugar donde se identificaron, al considerar que esas denominaciones eran “estigmatizantes”. Todas ellas preocupan por la posibilidad de que el virus varíe tanto que escape al control de las vacunas.

De 10 a 29 años

Vuelven a destacar los nuevos contagios en las franjas de 10 a 19 años, con 223 casos; y entre 20 y 29 años, con 303. En estos colectivos, la incidencia se sitúa en 2.132 y 2.386, respectivamente.

4.294 casos

La mayor tasa la vuelven a registrar los adolescentes entre 17 y 18 años, donde se dispara hasta 4.294 tras sumar 68 contagios.

249 infectados

Entre 30 y 39 años se han dado 118 casos, con una tasa acumulada de 782, a los que siguen los 131 positivos entre 40 y los 49 años, con una incidencia de 425.

Un centenar

También superan el centenar de casos entre 50 y 59 años, y una incidencia de 446. Entre 60 y 69, hubo 51 nuevos contagios.

12 de más de 90

A partir de los 70 años, tanto los contagios como la incidencia acumulada descienden, con 27 positivos hasta los 79 años, 22 en el colectivo de 80 a 89. Sin embargo, hubo 12 infectados con más de 90 años, un dato que provoca la tasa acumulada más alta entre los ancianos.