La Comisión de Salud Pública aprobó ayer una nueva actualización de la Estrategia de Vacunación que prevé que cuando haya disponibilidad de dosis de la nueva vacuna de Janssen se pueda usar de forma paralela a las vacunas de Pfizer y Moderna para incrementar el ritmo de vacunación de los grupos de más edad. Esta decisión aclara la inmunización del grupo de población de entre 66 y 79 años que no podía recibir la vacuna de AstraZeneca y estaba a expensas de la llegada de otros sueros, mientras que personas más jóvenes, en concreto de entre 60 y 65 ya estaban siendo vacunados con las dosis de la anglo-sueca.

Según informó el Ministerio de Sanidad en un comunicado, el documento incluye la ampliación de la edad de utilización de la vacuna de AstraZeneca (hasta ahora en los 65 años) para los grupos profesionales que realizan funciones esenciales, como profesores, policías o personal sociosanitario.

Además, la actualización número 5, que hoy tendrá que ser ratificada por el Consejo Interterritorial de Salud, destaca que la evidencia científica muestra que las personas con contagio previo, tanto sintomáticas como asintomáticas, "obtienen una respuesta inmune muy satisfactoria con una sola dosis, que no mejora con la administración de una segunda dosis". Por lo tanto se administrará una sola dosis para los de hasta 65 años y se mantienen la pauta de dos dosis para las que superen esta edad.

Con la vacuna de AstraZeneca se seguirá vacunando a personas de 56-65 años, comenzando por las de mayor edad. Además, se amplía el límite de edad (hasta ahora en 65 años) para completar la inmunización de los grupos de población priorizados por su actividad esencial, como personal sanitario y sociosanitario no en primera línea y trabajadores de instituciones sanitarias y colectivos en activo con una función esencial (Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado o docentes).

El texto aprobado por Sanidad y comunidades establece que "la vacuna a administrar no puede ser a demanda o elección con el fin de no socavar los principios y valores éticos de la Estrategia". La elección del suero se basará en la eficacia y en su indicación para los diferentes grupos de población. La pauta completa se administrará con la misma vacuna.

Mientras tanto, Alemania decidió ayer que solo administrará de manera general la vacuna AstraZeneca a mayores de 60 años, según acordaron el Gobierno federal y los poderes regionales, ante los efectos secundarios y algunos casos de trombosis detectados. La medida sigue la recomendación de la Comisión Permanente de Vacunación (Stiko), fundamentada en "datos existentes sobre efectos secundarios que son raros, pero graves", pero contempla, sin embargo, la posibilidad de aplicar la vacuna a menores de esa edad tras una "evaluación individual de cada caso", según informaciones de la televisión pública alemana ARD.

El Stiko, adscrito al Instituto Robert Koch (RKI) de virología, competente en la materia en el país, advirtió de que esos efectos secundarios pueden manifestarse entre 4 y 16 días después de haberles sido administrada una dosis a personas de menos de 60 años.

La canciller alemana, Angela Merkel, justificó la decisión en las recomendaciones emitidas por los expertos, "que no podemos ignorar", y ante los "riesgos" de sus efectos secundarios, incluida trombosis.