VITORIA - La pandemia del coronavirus ofrece síntomas de desaceleración en el territorio alavés y la cifra de personas fallecidas desde el pasado domingo así lo refleja. El único óbito certificado en la jornada del viernes deja en 24 la negra lista de muertes en el territorio en la última semana, para un total de 332. Sin embargo este dato es positivo en comparación con los 54 que hubo que registrar en la semana precedente. De esta manera el descenso llega hasta el 55,5% en los últimos siete días con unas jornadas de baja mortalidad como las de ayer viernes, con un único fallecido, o el martes y miércoles, con solo dos defunciones

La comparecencia matinal de la consejera de Salud, Nekane Murga, ha servido también para precisar que en el apartado de hospitalización domiciliaria, son todavía 26 los pacientes que continúan en el recinto del Gran Hotel Lakua y otros 49 están en la clínica IMQ Igurko. Se trata en ambos casos de pacientes en la recta final de su tratamiento y que están en ambos lugares por las especiales condiciones de aislamiento que tienen allí y como medida de protección para no propiciar posibles contagios en sus domicilios. En el resto de hospitales son 146 en total, con un leve incremento de tres nuevos pacientes. Por lo que respecta a los nuevos casos, hubo un pequeño repunte con 98 casos más, que elevan la cifra hasta los 3.551 infectados en todo Álava.

RESPONSABILIDAD DE LOS PADRES Se ha referido también la sailburu Murga a la esperada jornada de mañana en la que los más pequeños podrán volver a pisar la calle durante una hora máximo y sin alejarse más de un kilómetro de su domicilio. Ha reclamado la consejera "responsabilidad" de sus progenitores y "consciencia por lo que nos jugamos en el ámbito sanitario, social y psicológico. Nos jugamos más que la salud individual y el hecho de que la epidemia vuelva y mucho más", ha espetado con seried