Llegó la hora de que una mujer lidere Vitoria. Beatriz, Rocio, Maider, Ainhoa y Garbiñe son los cinco nombres que harán historia en los comicios del 28M, ya que gane quien gane, aupará a una de ellas a lo más alto de la política municipal: la Alcaldía. Una situación inédita también en Euskadi, ya que nunca antes una fémina había empuñando la makila de una capital.
Beatriz Artolazabal (PNV)
“Un antes y un después”
Por eso, para la candidata del PNV, Beatriz Artolazabal, es todo un “honor y orgullo” formar parte de esta candidatura. El mitin de inicio de precampaña y campaña han sido para ella “un antes y un después porque fue superarme como candidata, como mujer y como líder”.
Aunque es la primera vez que lidera una lista, esta campaña la afronta con “mucho respeto, mucha ilusión y con la pila bien cargada”.
A su juicio, lo mejor de una campaña es el poder compartir con mucha gente muchos momentos. Y las peores paradas son en este caso las familias. Si bien, la suya “siempre me apoya”. Días malos también los hay, “pero tenemos que ser capaces de dejar esas situaciones para afrontar con rigor y valentía esos retos”. Se queda con “las críticas constructivas” de las redes sociales, aunque, en todo caso, tiene “buenas sensaciones”.
Maider Etxebarria (PSE)
“Nuevos tiempos”
Esta primera convocatoria íntegramente femenina a la Alcaldía supone para la candidata socialista Maider Etxebarria “un arranque de unos nuevos tiempos. Yo tengo muchas ganas e ilusión. Es la segunda campaña a la que me presento”.
Por eso de tener ya experiencia, lo está llevando, en general “muy bien”. En cuanto lo que más le cuesta de la campaña, es ver cómo otros partidos hacen campaña “que solo buscan la confrontación”.
A la hora de conciliar lo tiene fácil “porque tengo a mis hijos que están ya en la universidad, viviendo fuera”. Y tira de su energía positiva para encarar los días que se tuercen.
Su receta para que calen los mensajes de los mítines en la calle es “la ventaja de ser y vivir en Vitoria y tener ese conocimiento de las personas a las que llegar en el día a día”.
Rocio Vitero (EH Bildu)
“Muy ilusionante”
Para la candidata de EH Bildu, Rocio Vitero, también Gasteiz está ante “un momento muy ilusionante”. Y lo que mejor lleva es tener un equipo y esa emoción de cuando la gente de los barrios, “transmite ese afecto y cercanía”. Lo más complicado es organizarte “porque hay muchos actos”.
Sobre cómo se lleva esto en casa, Vitero destaca también el apoyo que tiene por parte de su familia y amigas. Y si sale un día torcido, “a sonreír, que es la mejor manera de llegar a la gente”. La cual, por cierto, también para a Vitero por la calle, “sobre todo te hacen propuestas y también te anima”.
Sus mensajes de mítines sí que cree que llegan “porque hemos trabajado con la gente sus preocupaciones y necesidades”. Y aprovecha las redes sociales para llegar a más gente.
Ainhoa Domaica (PP)
“Momento histórico”
También para Ainhoa Domaica (PP) es “un orgullo e impagable” formar parte de este momento “histórico” de que Vitoria vaya a tener alcaldesa: “Es muy bonito, no solo para las que nos presentamos, sino para toda la ciudad”, destaca.
Lo que más le gusta de estar en campaña es estar con la gente y lo que menos, el tiempo que dedica a la familia. “No es fácil”, pero tiene “la suerte de tener un marido que me cubre para atender a la hija”.
Encara sus días malos “lo mejor posible, pero ayuda ver los ánimos que nos transmiten los ciudadanos”.
Para que sus mítines calen, el truco es el “tiempo que llevo escuchando a la gente”, con diferentes iniciativas, como Un café con Domaica. En su caso, emplea las redes sociales para transmitir su proyecto de cambio para Vitoria: “Son una vía más para escuchar a la gente”.
Garbiñe Ruiz (Elkarrekin)
“Muchísimo orgullo”
Para Garbiñe Ruiz (Elkarrekin) presentarse como candidata a la Alcaldía de Vitoria, significa “muchísimo orgullo y responsabilidad que afronta con mucha ilusión”.
Lo mejor que lleva es ser la cabeza visible de un proyecto que tiene “tanta ambición para mejorar la vida de las personas”. Lo que más le cuesta es gestionar la agenda a la que están sometidas todas las candidatas.
De ahí que no sea fácil conciliar en plena campaña electoral para intentar lograrlo: “voy tirando de la familia. Afortunadamente, muchos hombres de nuestra generación ya tienen asumido el papel que tienen en la crianza y en las labores del hogar”.
Para que sus mítines calen en la calle, “creo que, sobre todo, hay que aterrizar mucho las propuestas. Precisamente, el mayor problema que tuvo la Catedral vieja en sus orígenes –señala, en clara alusión al lugar de esta entrevista– es que no tuvo pilares fuertes para sostenerla. Lo que queremos hacer es lo que se hizo con la Catedral en su día: reforzar esa base para poder seguir construyendo”.
