- Aquejado de una larga enfermedad, ayer falleció Julen Madariaga a los 88 años. El histórico militante abertzale fue uno de los fundadores de ETA, posteriormente, tras el asesinato del concejal del PP de Donostia Gregorio Ordóñez, se desvinculó de Herri Batasuna y condenó la violencia. Militante de Aralar, Madariaga participó también en el movimiento pacifista Elkarri.

Julen Madariaga nació en octubre de 1932 en Bilbao en el seno de una familia nacionalista vinculada al PNV, lo que hizo que se exiliaran a Chile tras la Guerra Civil. Abogado y doctor en Derecho por la Universidad de Cambridge, inició su carrera política en Deusto y en 1952 fundó el grupo EKIN, entre otros, con José María Benito del Valle, Jose Luis Álvarez Enparantza Txillardegi o Jose Manuel Agirre. Tras graves discrepancias con la dirección de PNV, Madariaga fue uno de los fundadores de ETA, paso que compartió con Txillardegi, José Manuel Aguirre, José María Benito del Valle, Alfonso Irigoien, Iñaki Larramendi y Rafael Albisu. Aunque históricamente se ha datado el nacimiento de ETA en julio de 1959, Madariaga explicaba en una entrevista a un rotativo madrileño que el proceso de nacimiento de la organización se hizo a fuego lento. "Fue un proceso de varios meses, que va desde nuestra ruptura como EKIN con el PNV, la reunión de Deba en diciembre de 1958 en la que se encarga a Txillardegi buscar un nombre para la organización, el documento enviado a nuestra delegación en Caracas con las siglas nuevas, hasta la carta remitida al lehendakari Aguirre y fechada el 31 de julio de 1959, día de san Ignacio, en la que se le informa de la creación de Euskadi eta Askatasuna".

Una vez dado este paso, Madariaga fue detenido por primera vez un año después y encarcelado en 1961 junto con varios otros amigos tras una acción contra un tren que transportaba a exsoldados franquistas a un acto en Donostia. Arrestado varias veces, sufrió torturas de la mano de Melitón Manzanas. Detenido en Iparralde se exilió a Argelia en 1965 donde permaneció un año. Se trasladó a Bélgica tras las primeras divisiones ideológicas en la organización tras la IV Asamblea de ETA, hasta que regresó a Iparralde en 1971, aunque en 1972 fue expulsado temporalmente a Chile. De vuelta a Euskadi, fue encarcelado en 1989 y condenado a cuatro años de prisión por complicidad con ETA.

Tras el asesinato del concejal del PP del Ayuntamiento de Donostia Gregoio Ordónez en enero de 1995, Julen Madariaga se desvinculó de Herri Batasuna por el hecho de que la formación de la izquierda abertzale no condenara el atentado contra el dirigente popular. Convencido de que la lucha armada no tenía ya cabida, se incorporó a Aralar y se presentó a las listas de las elecciones a la Diputación de Bizkaia (2003), al Senado y al Parlamento Europeo (2004). Además, también formó parte activa del movimiento pacifista Elkarri

Arrestado nuevamente en 2006 por orden del juez Grande-Marlaska, fue puesto en libertad bajo fianza.

Fueron muchas las reacciones al fallecimiento de Julen Madariaga. A través de las redes sociales, el coordinador general de EH Bildu, Arnaldo Otegi, recordó a Madariaga como "abertzale y comprometido con la libertad de nuestro pueblo", al tiempo que mostró sus condolencias a familiares y amigos. Por su parte, la portavoz parlamentaria de la coalición soberanista Maddalen Iriarte despedía a Madariaga con la frase "partes de la historia que hemos conocido, cuando las personas desaparecen". El secretario general de Sortu, Arkaitz Rodríguez, destacaba que Madariaga ha fallecido "después de toda una vida luchando por la libertad de nuestro pueblo".

El fundador de Aralar, Patxi Zabaleta, restaltó que "la mayoría" de los fundadores de ETA acabaron en Aralar y que Madariaga "tenía claro que el nacionalismo es plural" y necesita "una lucha dialéctica". "Tenían muy claro, incluido Julen Madariaga, que el nacionalismo es plural, que existe derecha e izquierda, y que la derecha y la izquierda deben mantener una lucha dialéctica para que este país avance", aseguró.

Por su parte, el PP de la CAV calificó como "una nueva humillación a las víctimas" las "condolencias" expresadas por Otegi a los allegados de Madariaga. "El máximo representante de Bildu, socio del PSOE, despidiéndose del fundador de la banda terrorista y sanguinaria de ETA como un héroe en las redes sociales", señalaba el PP.

Posteriormente, Arnaldo Otegi denunciaba en Twitter que Instagram y Facebook le habían bloqueado las cuentas "por hacer alusión al fallecimiento" de Julen Madariaga. El dirigente de la izquierda abertzale añadía: "¡No nos callarán!".

"Comprometido con la libertad de nuestro pueblo, condolencias a familiares y amigos"

Coordinador general de EH Bildu

"Tenía claro que el nacionalismo es plural y que debe haber lucha dialéctica para avanzar"

Fundador de Aralar

"Fue una figura trágica de nuestra historia y fuente de graves sufrimientos y crímenes"

Ptvoz. del PP en la Cámara de Gasteiz