- La brecha es insuperable. A pesar de los últimos coleos de la polémica entre el PSOE y el PP para renovar el Consejo General del Poder Judicial, el choque parece insalvable y es cuestión de tiempo que se active el plan alternativo: que el Gobierno español apruebe una modificación legal para renovar el órgano de gobierno de los jueces sin el PP, simplemente por mayoría absoluta con sus socios de la investidura. Los contactos ya han comenzado y el PNV también ha sido sondeado.

El PSOE lanzó ayer un ultimátum al PP, y los populares siguen planteando una condición de máximos a todas luces inasumible: que el pacto sea entre ellos dos, sin Unidas Podemos, lo que supondría desairar al socio del PSOE dentro del Gobierno de coalición. En una rueda de prensa para defender la moción del PSOE en el Senado sobre este debate, el portavoz socialista en la Cámara, Ander Gil, ofreció ayer al PP una “última oportunidad” para desbloquear la renovación porque, de lo contrario, el Gobierno español buscará “otros cauces legislativos”. La portavoz del Gobierno español, María Jesús Montero, confirmó que el Ejecutivo ya ha comenzado a mantener “conversaciones discretas” con los grupos para rebajar la mayoría necesaria de dos tercios a una mayoría absoluta. Además, no descartó hacer lo mismo con otras instituciones del Estado, como el Tribunal Constitucional o el Defensor del Pueblo.

En ese sentido, fuentes del grupo del PNV en el Congreso de los Diputados consultadas por este periódico confirmaron que el Gobierno español les ha trasladado que, si el PP se mantiene en el bloqueo, su intención es aprobar una reforma legislativa para que los nombramientos se puedan aprobar por mayoría absoluta. El Gobierno español los ha sondeado para conocer si estarían dispuestos, y el PNV respondió que estaría dispuesto a analizarlo si le hicieran llegar un documento con la propuesta formal. El documento aún no ha llegado, de manera que los jeltzales no quieren tener un posicionamiento público sobre algo que todavía no se ha oficializado. “Los estudiaremos. Entendemos que busquen una solución al bloqueo”, apostillaron.

En este contexto, el PP continuó ayer sin dar su brazo a torcer y exigió al PSOE que margine a Unidas Podemos en esta negociación. El líder de los populares, Pablo Casado, avisó ayer a Sánchez de que, si quiere pactar, debe velar por la “despolitización” del proceso y dejar fuera a Podemos. No parece que el PP se vaya a rendir sin plantar batalla, ni que vaya a asumir un hipotético cambio legal sin tratar de tumbarlo después ante los tribunales. El PP ha avisado de que acudirá a las instancias europeas si Sánchez decide “asaltar” el poder judicial. En realidad, Casado trató de matizar que él no quiere “recurrir a Bruselas”, pero es tan solo un formalismo porque dice que Europa actuaría “prácticamente de oficio”.

Casado dijo que países “tan criticados por Pedro Sánchez como Polonia y Hungría tienen ya dificultades para recibir los fondos de reconstrucción porque han modificado leyes de elección de su justicia”. “Esto no lo digo porque yo vaya solo a recurrir a Bruselas, que de hecho actuaría prácticamente de oficio. Lo digo porque no es propio de democracias europeas desarrolladas”, sostuvo.