- Dos días después de ser apartado del cargo de president de la Generalitat por el Tribunal Supremo tras ser condenado por desobediencia, Quim Torra se despidió ayer del Parlament en un pleno monográfico sobre su inhabilitación celebrado a petición de los dos partidos del Govern, JxCat y ERC. En dicho marco, el expresident desplegó toda su artillería y, ante representantes de todos los grupos excepto el PSC, que no asistió, llamó a convertir las próximas elecciones en Catalunya en un plebiscito que avale la ruptura con el Estado. Su destitución ha supuesto “un golpe de Estado” orquestado en Moncloa, denunció, después de que los tres últimos presidents -Artur Mas, Carles Puigdemont y él mismo- hayan sido “apartados o inhabilitados por defender lo que dicen las urnas”. El pleno aprobó además una resolución de JxCat y ERC por la que el Parlament no reconoce “como legítima” la sentencia del Supremo, así como otra de la CUP que califica el fallo de “aberración democrática”.

Torra fue el primero en intervenir en un pleno al que asistió en calidad de invitado por su “significación institucional”, y a su llegada fue recibido entre aplausos de diputados y funcionarios. El comienzo de la sesión se demoró en torno a un cuarto de hora después de que Ciudadanos y el PSC-Units pidieran suspender la sesión por “improcedente”, lo que fue rechazado por la Mesa del Parlament tras reunirse.

Torra tomó por fin la palabra e insistió en la importancia de la próxima cita electoral porque la “voluntad de ruptura democrática es la única manera de independizarse”. “De nosotros y de todos los catalanes depende que sea un plebiscito de ratificación del mandato del 1-O”, insistió, y defendió que “el próximo Parlament que surja de las urnas sea fiel al mandato de la ciudadanía: o monarquía española o república catalana”. Tachó su inhabilitación de “golpe de Estado” contra las instituciones catalanas y acusó al TS de pisotear su soberanía.

Torra, que llegó a la sesión en medio de un largo aplauso de los diputados independentistas, puestos en pie, cargó contra los partidos de la oposición que llevan “la libre expresión de los diputados en este Parlament a la justicia”. “Vergüenza”, les dijo, y vaticinó que los tribunales europeos le acabarán dando la razón, ya que es el único sitio en el que el independentismo puede obtener justicia. Ayer trascendió que su defensa ha presentado un recurso de súplica para que el Tribunal Superior de Justicia catalán deje en suspenso la ejecución del fallo por el que fue inhabilitado.

El pleno extraordinario de ayer fue prolijo en intervenciones, incluyendo la del president sustituto de la Generalitat, Pere Aragonès, que aseguró que “tras la inhabilitación del president Quim Torra, no hay president” en Catalunya, y añadió que no lo habrá hasta que el Parlament elija a otro. Calificó al actual Ejecutivo como “Govern del president Torra” y se comprometió a seguir trabajando por “la libertad y la dignidad del país”, en el día a día de los catalanes y en la lucha contra el covid-19. “No es normal que un president sea inhabilitado por poner una pancarta”, señaló, y criticó que Moncloa haya aplicado “el Código Penal ante un conflicto que se puede resolver en las urnas”.

Tras la intervención de todos los grupos, el presidente de la Cámara, Roger Torrent, decretó un receso durante el que JxCat y ERC presentaron una resolución para que el Parlament no reconociera “como legítima” la sentencia que inhabilita a Quim Torra. Esta iniciativa, que la Cámara hizo suya tras ser aprobada, denuncia “la vulneración del derecho a la libertad de expresión”, dice que los efectos del 155 siguen vigentes y llama a las instituciones catalanas a denunciar internacionalmente la inhabilitación. C’s y el PPC no presentaron propuestas al debate y abandonaron el pleno antes de que se produjera la votación, mientras que la CUP y los comuns sí defendieron sus propias iniciativas -la de la CUP también fue aprobada-. C’s y el PSC pidieron además a la Mesa que no admitiera a trámite la propuesta de JxCat y ERC por ser contraria a “disposiciones constitucionales”, lo que fue rechazado.

“La voluntad de ruptura democrática es la única manera de independizarse”

Expresident de la Generalitat

“Tras la inhabilitación de Quim Torra no hay president, y no lo habrá hasta que se elija a otro”

President sustituto de la Generalitat