Otegi dice que el PSE ya no es socialista pero por si acaso sueña con pactar algo con Mendia

En tiempos de Pepe Botella, un afrancesado español llevó a su hijito a una recepción real. Vestía el niño un uniforme de mariscal con espadita y todo, y el hermano de Napoleón le preguntó para que la quería. "¡Para matar franceses!", dijo vivaracho el patriotilla. Y su padre horrorizado, solo acertó a añadir. "No haga caso majestad, son cosas que oye en casa". Como Carlos Iturgaiz que últimamente solo dice cosas que oye en casa, pero en casa de Abascal, compañero del PP durante muchos años. No sé para qué Ortega Smith viene a Euzkadi a montar la bronca teniendo a su mejor intérprete en el acordeonista de la Marcha Real al que solo le hace falta salir, en el teatrillo que denuncia del PNV, con su instrumento junto a Oyarzábal tocando las maracas y animando el cotarro ya que su discurso Ni es foral, Ni políticamente correcto. Me gustaría saber bajo que cama se mete Alfonso Alonso cuando le escucha.

Arnaldo Otegi es el de la frase de los Ni Nis. La dice embutacado. Ni velódromo, Ni pancarta. Campaña de butaca, como queriendo decir que es hora ya de pisar alfombra. Predice que el próximo gobierno no será Ni socialista, Ni abertzale. Da por hecho que el PNV y el PSE formarán gobierno tras unas elecciones que no quería, unas transferencias que tampoco le gustaban demasiado, una foto con Revilla que le recordaban a Franco inaugurando pantanos y, tras una campaña donde prometerán el oro y el moro sin decir cómo se pueden pagar esas promesas aéreas y etéreas, sacando a pasear la desgracia de Zaldibar y diciendo que las pintadas se quitan con acetona. Todo un programa para salir de la crisis junto a sus dos sindicatos jurásicos de cabecera, ELA-LAB, ya que lo de ellos es el contrapoder, la pancarta y la huelga por la huelga. Todo un programa de reconstrucción.

Sobre el Partido Socialista comenta que ya no es socialista pero por si acaso sueña con pactar algo con Mendia ya que estuvieron de merienda en el txoko, aunque sea una reformilla laboral escrita sobre hielo. Un partido socialista al que presentan como monaguillo del PNV buscando que sea monaguillo de Maddalen Iriarte a la que quieren hacer lehendakari con ese Frente Popular de

diseño Gorrotxategi. Pero los socialistas Ni son tontos, Ni están por la labor. Y les dicen, Na, Nai.

Del PNV se dice que no hará un gobierno abertzale entendiendo por abertzale lo que dicta Gara y el comisariado político que para abertzales los de EA y ya se los han comido de un bocado. Un PNV que el 31 de julio cumplirá 125 años y si un partido cumple 125 años algo sabe de lo que tiene que hacer y de lo que no tiene que hacer y sobre todo saber poner cara de póquer ante los cantos de sirena. Otegi dice que no puede hacer frente a los retos del país y el PNV contesta que a crisis fuerte, mayoría fuerte. Tan sencillo como esto.

A pesar de este panorama de Ni-Nis se apunta un panorama electoral que le dará la mayoría absoluta al PNV y al PSE para, en cuatro años, hacer muchas de las mil cosas que los Ni-Nis no les han dejado hacer con sus No-Noes. Esto es lo que hay, Sra. baronesa.