El líder de la ultraderechista Liga y exministro del Interior, Matteo Salvini, será enjuiciado en Italia por un supuesto delito de secuestro de personas en el caso Open Arms, por dejar bloqueados en el mar durante más de 20 días a unos 150 migrantes rescatados por esta organización en agosto de 2019.

Así lo ha decidido hoy un juez del Tribunal de Palermo (Sicilia), después de que la Fiscalía pidiera procesarlo y la defensa de Salvini alegara que la decisión fue tomada por todo el Gobierno y no solo por el extitular de Interior.

El juicio se celebrará a partir del 15 de septiembre, según han informado los medios locales.

La odisea de estas personas concluyó en la noche del 20 de agosto de 2019, cuando la Fiscalía permitió el desembarco en Lampedusa de los 83 inmigrantes que quedaban a bordo, pues muchos habían sido evacuados antes e incluso se habían tirado al agua para llegar a nado a la costa.

"¿Me enjuician por esto, por haber defendido a mi país? Voy con la cabeza bien alta, también en vuestro nombre. Primero Italia. Siempre", ha escrito Salvini en un mensaje en las redes sociales.

Por su parte, Open Arms celebró en las redes sociales la decisión: "Felices por todas las personas que rescatamos durante la misión 65 y en todos estos años. La verdad del Mediterráneo es una, estamos en el mar para contarla".

El fundador de Open Arms, Òscar Camps, ha señalado en un mensaje que violar "un derecho fundamental como el de la protección de los seres humanos en el mar para hacer propaganda política es vergonzoso".

"Es importante que avancemos, es absurdo que en el siglo XXI se haya aceptado cuestionar la protección de la vida y la dignidad de las personas. Que el juicio sea una oportunidad para juzgar un fragmento de la historia europea y para volver a priorizar los principios democráticos en los que se basan nuestras constituciones", ha añadido.

El pasado 20 de marzo, la Fiscalía de Palermo había pedido procesar a Salvini, durante la segunda vista de la audiencia preliminar del proceso, y había afirmado que "no se trató en absoluto de un acto político sino de un acto administrativo" del Ministerio del Interior.

Este sábado, la abogada de Salvini, Giulia Bongiorno, expuso durante cuatro horas los argumentos para pedir que no se celebrara el juicio y justificó que la decisión de no permitir a estas personas desembarcar en Italia fue adoptada por todo el Gobierno, de manera conjunta.

Por eso, pidió al tribunal siciliano que no procediera a juicio por la indiscutibilidad del hecho o porque el hecho no existe. "Juez, no deje que la sentencia sustituya a las urnas", concluyó Bongiorno, según los medios locales.

Salvini también tiene abierto en la ciudad siciliana de Catania (sur) otro proceso similar, en este caso por bloquear un barco militar con 131 inmigrantes a bordo en julio de 2019, pero el pasado 10 de abril la Fiscalía pidió que se archive la causa.