ajo el lema Trump no representa al Partido Republicano que yo amé, la iniciativa Votantes Republicanos contra Trump (RVAT) se ha opuesto decididamente a la candidatura de Trump. 43 Alumni for Biden, un comité de acción política creado por una serie de personas vinculadas a la administración de George W. Bush, no sólo se han opuesto a Trump sino que apoyan a Biden. Tal como lo describió el Washington Post, el Proyecto Lincoln (LP), es un Super PAC formado a fines de 2019 por antiguos votantes del Partido Republicano, entre los que destacan por su activismo Never Trump Steve Schmidt, que dirigió la campaña presidencial de John McCain en 2008, Mike Madrid, exdirector político del Partido Republicano de California, y George Conway, esposo de Kellyanne Conway, asesora de Trump hasta junio de este año. Como en el caso de 43 Alumni, en abril de 2020 Lincoln Project anunció su respaldo al candidato demócrata, Joe Biden.
Tal como declaró Madrid para WJCT en septiembre, “lo que estamos viendo es una ruptura histórica de republicanos e independientes de tendencia conservadora, que creen que el presidente de los Estados Unidos representa una clara amenaza para la República. En realidad, ya no se trata de ser republicano o demócrata. Para la mayoría de nosotros, no es un debate sobre política fiscal o política exterior o diferentes cuestiones ideológicas. Es que el presidente está literalmente socavando las instituciones básicas del Gobierno estadounidense”.
Sarah Longwell, directora ejecutiva de Defending Democracy Together, dijo a CNN que la campaña publicitaria de estos grupos está dirigida a votantes suburbanos blancos con estudios universitarios en los estados batalla de Michigan, Pensilvania, Florida, Wisconsin, Carolina del Norte y Arizona. Se han centrado en la emisión de breves anuncios de no más de dos minutos que han circulado viralmente a través de las redes pero también han producido anuncios televisivos que han sido emitidos en los citados estados. Así, por ejemplo, RVAT invirtió un millón de dólares en publicidad televisiva en junio en Pensilvania. De hecho, el objetivo de RVAT era producir una campaña publicitaria de 10 millones de dólares para la producción de cien testimonios anti-Trump y para agosto de 2020 ya se habían producido 500. Paralelamente, entre julio y septiembre el Proyecto Lincoln había recaudado 39 millones de dólares y producido cientos de anuncios breves.
El Philadelphia Inquirer publicó un artículo expresando que estos grupos estaban “librando una guerra de guerrillas dentro del Partido Republicano”. Estos grupos tienen siete razones fundamentales para no apoyar a Trump y es sumamente interesante observar los motivos y argumentos del sector más conservador de la sociedad coinciden en buena medida con los razonamientos más puramente progresistas:
Trump no significa nada más que Trump, y no es sino una gran mentira. En el anuncio de LP Impotus Americanus una voz en off (parodia de David Attenborough) describe la naturaleza y hábitos del ejemplar más corrupto de la especie Impotus americanus, un espécimen de 140 kilos de peso que destaca por su tez naranja, poco común en el medio natural, en peligro de extinción este mes de noviembre. En octubre, el exdirector de la CIA y general retirado, Michael Hayden, en un anuncio de RVAT expresó que “a Trump no le importan los hechos, a Trump no le importa la verdad” y terminaba diciendo que “Biden es un buen hombre, Donald Trump no lo es”. La imagen de Trump como un mentiroso compulsivo y un narcisista es sin duda el objetivo principal de los ataques desde dentro y fuera del partido.
No es un candidato conservador. Dan Barkhuff, un antiguo médico de las fuerzas de operaciones especiales de la Armada y fundador de Veterans for Responsible Leadership, criticaba a Trump por no respetar la Constitución ni los valores conservadores cardinales tales como la independencia del sistema judicial, el acatamiento del sistema fiscal o los derechos de los estados. Y afirmó que el votante de Trump “es cómplice” de su corrupción.
En tiempos de crisis, no está uniendo al país sino dividiéndolo. En palabras del exsecretario de defensa Jim Mattis para la revista Atlantis, “Donald Trump es el primer presidente que no intenta unir al pueblo estadounidense, ni siquiera pretende intentarlo. Todo lo contrario, trata de dividirnos”. En agosto de 2020, el ex alto funcionario de la administración Trump, Miles Taylor, calificó a Trump de “peligroso” y los medios se han hecho eco de la “hiperconflictividad de la era Trump”. El exgobernador de Ohio John Kasich en el anuncio de LP Crossroad, afirmó que Biden significa unidad, avenencia y harmonía en tiempos de crisis frente a la brutal desmembración institucional, fragmentación social y segmentación política que arrastra Trump.
. Inoperante respuesta frente al covid-19. El anuncio de LP Unfit, There is Mourning in America y otros han divulgado la imagen de Trump como “el contaminador en jefe de los Estados Unidos”. En septiembre, Olivia Troye, asesora de seguridad nacional de Pence y miembro principal del equipo de trabajo contra el covid-19, denunció de incompetente e infructuosa la respuesta de Trump a la pandemia y acusó a la Casa Blanca de ser “un foco de infección”.
Fraude fiscal. Es el tema del anuncio Fairytale de LP y del anuncio de RVAT del excongresista republicano Jim Kolbe denunciando la falta de responsabilidad fiscal de Trump y su estafa a la hacienda pública.
Apoyo a los supremacistas blancos. Desde el GOP se ha visto con malos ojos el uso masivo de la bandera de la traición (bandera confederada) en los mítines de Trump. La exempleada de seguridad nacional de la administración Trump Elizabeth Neumann tildó a Trump de “racista” y afirmó que era “una amenaza para los Estados Unidos”. El anuncio Mattis de LP incidía en las críticas de este general tras la brutal carga policial de Lafayette Square, y en los mensajes del exdirector de la CIA Michael Hayden y otros dirigentes del FBI que sostienen que los grupos supremacistas son uno de los mayores peligros del país.
Política migratoria infantil. Las imágenes de inmigrantes ilegales menores de edad separados de sus familias en jaulas de metal han causado una cascada de protestas. Bajo el lema Esto es inhumano y antiestadounidense. No somos eso el anuncio de LP Crue sobre estos 545 menores separados de sus padres se ha convertido en un fenómeno viral.
La “guerra contra la verdad” de Trump ha erosionado gravemente al elefante rojo y perjudicado la imagen del partido mucho más allá de esta campaña electoral. El anuncio Pizza muestra a una madre que responde a su hijo cuando éste le pregunta por quién va a votar: “Votaré por ti, no por él”.
Pero si para muchos Trump está dañando el partido y los ideales republicanos, el anuncio que más daño ha hecho a Trump personalmente ha sido #TrumpIsNotWell en el que el presidente aparece caminando lenta y vacilantemente por una rampa en West Point y luchando por levantar un vaso de agua con las dos manos. Trump reaccionó tan violentamente que el anuncio se convirtió en un fenómeno viral y LP recaudó millones de dólares en pocos días. Y es que a Trump no le importa ni el pueblo, ni el partido, ni las ideas, ni el futuro del país, sino únicamente y por encima de todo y de todos, su propia imagen.
