LONDRES. El líder del Partido Laborista británico, Jeremy Corbyn, confirmó hoy que su formación quiere que el Reino Unido tenga una unión aduanera con la Unión Europea (UE) tras el "brexit", cuya fecha está fijada para el 29 de marzo de 2019.
En un discurso en Coventry (centro de Inglaterra), el líder del principal partido de la oposición aclaró su posición antes de que el Reino Unido empiece una nueva fase de las negociaciones sobre el "brexit", centrada en el periodo de transición.
"El Laborismo buscará negociar una nueva y exhaustiva unión aduanera entre el Reino Unido y la UE para asegurar que no hay aranceles con Europa, y para evitar la necesidad de tener una frontera dura con Irlanda del Norte", afirmó el líder izquierdista.
La nueva relación tiene como objetivo, dijo, asegurar que "cumplimos con nuestro ambicioso programa económico, tomar los pasos esenciales para intervenir, mejorar y transformar nuestra economía y construir una economía para el siglo XXI que funcione para muchos, no para unos pocos".
Al defender su posición a favor de una unión aduanera, Corbyn resaltó que cada país que está "geográficamente cerca de la UE sin ser miembro de la UE, ya sea Turquía, Suiza o Noruega, tiene algún tipo de estrecha relación con la UE".
Corbyn defendió, asimismo, la importancia de que no haya una frontera física entre las dos Irlandas a fin de preservar el proceso de paz en Irlanda del Norte, firmado hace veinte años.
Al mismo tiempo, el político reiteró que un Gobierno laborista -si llegase al poder- garantizará inmediatamente los derechos de los miles de ciudadanos comunitarios que viven en el Reino Unido.
Agregó que los comunitarios, desde la celebración del referéndum del "brexit" en 2016, han vivido "un horror incierto" sobre su futuro ya que el Gobierno no ha garantizado sus derechos.
"Vamos a proteger sus derechos legislando inmediatamente para garantizar la residencia permanente para los nacionales de la UE que viven aquí, y el derecho de traer a sus familias", añadió.
Corbyn insistió en que en las negociaciones con Bruselas, debe darse prioridad a "los empleos de la gente", por lo que se comprometió a construir un Reino Unido "más próspero y más igualitario", en el que "cada región (del país) se beneficie y ninguna comunidad quede relegada".
El domingo, el portavoz laborista del "brexit", Keir Starmer, ya había adelantado que su formación estaba a favor de negociar un nuevo acuerdo libre de aranceles con la UE para que las empresas del Reino Unido puedan tener acceso al mercado comunitario.
Hasta ahora, el principal partido de la oposición británica había sido ambiguo sobre el "brexit" al afirmar que quería retener los "beneficios" del mercado único y de la unión aduanera, pero sin aclarar explícitamente de qué manera lo haría.
El Laborismo aclaró su posición antes de que este viernes, la primera ministra británica, la conservadora Theresa May, pronuncie un discurso en el que espera aclarar la posición del Gobierno "tory" en las próximas negociaciones sobre el "brexit".
May, que acaba de consensuar con sus ministros la posición oficial, espera confirmar que Londres negociará la salida del Reino Unido del mercado único europeo y de la unión aduanera a fin de poder negociar acuerdos comerciales con otros países.