Londres - El Reino Unido simplificará los trámites que tendrán que hacer los ciudadanos comunitarios que quieran permanecer en el país después del Brexit, en 2019, anunció ayer el secretario de Estado británico de Interior, Brandon Lewis.
Este proceso, que se hará online, empezará a finales de 2018 y los comunitarios deberían conocer su situación en un breve plazo de tiempo, de unas dos semanas, una vez presentada la documentación.
Lewis comunicó ayer la medida al subcomité de la Unión Europea (UE) de la Cámara de los Lores, a raíz de la inquietud de los tres millones de comunitarios que viven en el Reino Unido sobre la gran cantidad de documentos que tienen que rellenar actualmente para solicitar la residencia permanente, de unos 85 folios. Según explicó Lewis, habrá una “presunción a favor” de aprobar las solicitudes cuando estos registros empiecen a funcionar, meses antes de la retirada del Reino Unido de la UE, en marzo de 2019.
La primera ministra británica, la conservadora Theresa May, comunicó la semana pasada, tras alcanzar el acuerdo con Bruselas sobre la primera fase de las negociaciones sobre el Brexit, que los comunitarios que viven en el Reino Unido podrán permanecer en el país y tendrán los mismos derechos de los que disfrutan actualmente.
Ese acuerdo, alcanzado el pasado viernes, es recíproco para los británicos que residen en otros países europeos.
la burocracia genera ansiedad Lewis dijo que la gente puede sentirse “segura de que no tiene que hacer nada inmediatamente”, al referirse a la ansiedad de muchas personas por el alcance de la actual burocracia para pedir la residencia permanente en el Reino Unido.
Puntualizó, no obstante, que el ministerio de Interior tiene que ser riguroso a la hora de considerar las peticiones de residencia, pero reconoció que el actual sistema es “demasiado complicado y burocrático”, ya que se pide todo tipos de documentos, como demostrar que el solicitante es autosuficiente económicamente o que contribuye a la seguridad social.
“Hay una presunción de que (la petición) será concedida. La única circunstancia en que a alguien no se le concederá el estatuto de asentado (residencia) es si la comprobación de antecedentes muestran que hay criminales o que alguien ha tratado de reclamar que es ciudadano de la UE en el Reino Unido, cuando no lo es”, agregó.
El acuerdo del viernes ha permitido pasar a la segunda fase de las negociaciones sobre el Brexit, que estará centrada en la futura relación comercial y de seguridad entre Londres y Bruselas. En virtud de ese acuerdo se garantizan los derechos de los comunitarios que viven en el Reino Unido, Londres pagará una suma considerable por el “divorcio” y la frontera entre Irlanda del Norte y la República de Irlanda seguirá siendo invisible.
Riesgos económicos para Irlanda La salida del Reino Unido de la Unión Europea continúa presentando “grandes riesgos” para la recuperación económica de la República de Irlanda, advirtió ayer el Banco Central Irlandés (ICB). A pesar de que Londres y Bruselas han llegado a un principio de acuerdo para mantener la frontera norirlandesa tan abierta como sea posible tras el Brexit, el informe del IBC señala que los cambios en las relaciones comerciales de ambos bloques podrían afectar a las exportaciones irlandesas, uno de los motores de su economía.
La salida de Irlanda del Norte de la unión aduanera y el mercado único podría imponer una barrera estricta entre las dos jurisdicciones de la isla que afectaría, sobre todo, al sector agroalimentario y al manufacturero, según el documento. La vicegobernadora del ICB, Sharon Donnery, destacó en el texto que la recuperación de la economía nacional sigue siendo “sólida”, después de la grave crisis sufrida entre 2008 y 2013, aunque advirtió de que las amenazas “son reales y variadas”.
“El acuerdo alcanzado la pasada semana entre el Reino Unido y la UE es bienvenido, pero el Brexit continúa presentado grandes riesgos, dado que cualquier acuerdo final está aún sujeto al desenlace de las conversaciones en marcha, que son importantes y complejas”, indicó Donnery. - Efe