MADRID - El Centro de Investigaciones Sociológicas publicó ayer una encuesta de voto que es prácticamente un calco de los resultados de las elecciones generales del 26 de junio. El PP se mantiene como primera fuerza, los socialistas conservan la segunda plaza, Unidos Podemos ocupa el tercer puesto y Ciudadanos no logra mejorar su cuarta posición. Las variaciones en el porcentaje de voto son tan reducidas que no pasan de una mera anécdota. Podría interpretarse que la voluntad de la ciudadanía se mantiene intacta y que unas terceras elecciones generales no servirían para romper el bloqueo político a la hora de elegir al próximo presidente español, pero también es cierto que la encuesta se celebró inmediatamente después de los comicios y no cabía esperar una convulsión en los resultados en tan reducido margen de tiempo. Sin embargo, el sondeo sí arroja un dato llamativo. El PSOE es el único de los cuatro grandes partidos que sube en porcentaje de voto, mientras que los otros tres bajan. Aunque las variaciones sean mínimas, esa fotografía supone que el socialismo ha recuperado parte de sus apoyos y, sobre todo, se reafirma como primera fuerza de la izquierda por delante de Unidos Podemos y como alternativa a Mariano Rajoy. La posibilidad de que el partido morado desbanque al socialismo parece alejarse porque pierde respaldo. En cualquier caso, la de ayer fue solamente una encuesta, y no hay más que recordar que todos los sondeos previeron que Podemos superaría al socialismo en campaña y finalmente no fue así. Ahora podría suceder a la inversa.

El sondeo solo ofrece porcentajes y no su traducción en escaños, pero refleja con claridad la victoria del PP, con un 32,5% frente al 33,03% de junio. El PSOE sigue lejos, subiendo del 22,66% al 23,1%. Unidos Podemos baja del 21,1% al 19,6%, y Ciudadanos también disminuye desde el 13,05% al 12%. La subida socialista es de un estrecho medio punto, pero es un soplo de aire fresco para el partido tras dos batacazos en las generales de diciembre y junio, donde pulverizó dos veces su mínimo histórico de respaldos. El PSOE sube por primera vez en medio año, aunque sea en una encuesta. El dato cobra relevancia teniendo en cuenta que es el único que progresa y quien más votos se deja en la cuneta es su rival, Unidos Podemos, con un punto y medio menos.

nuevas elecciones La encuesta se realizó a través de 2.479 entrevistas entre el 1 y el 11 de julio, de modo que el trabajo de campo coincidió con la decisión del Comité Federal socialista de rechazar la investidura de Mariano Rajoy. En cualquier caso, esa decisión se tomó el día 9, y la encuesta se cerró dos días después, de manera que puede resultar osado establecer una relación de causa-efecto entre el veto al candidato y la subida electoral. Lo que sí está claro es que, al menos con esos resultados en la mano, el socialista sería el partido más beneficiado por una repetición de las elecciones, lo que puede llevarle a atrincherarse en su posición y vetar la investidura, una vez alejado el riesgo de sorpasso. También puede ser el clavo ardiendo al que se aferre la dirección socialista para aplacar las voces de algunos barones y de históricos referentes del partido que piden una abstención.

El PP lo vio venir y, por boca de su portavoz en el Congreso, Rafael Hernando, le pidió que no use la encuesta para justificar su rechazo. Rajoy también sale reforzado y podría mantener cómodamente el pulso a la oposición, a la que ha retado con dejarle gobernar o ir a unos terceros comicios. Las elecciones prácticamente no le provocarían ningún rasguño. Sin embargo, cabe la opción de que la mera repetición electoral alterara las previsiones porque provocara una ola de descontento ciudadano.

Cabe recordar que Pablo Iglesias se presentó a las elecciones con el propósito de superar al socialismo y no lo logró. Supuso un jarro de agua fría para su partido y sus socios de IU, y sumió a la coalición en un letargo del que aún no se ha recuperado, puesto que mantiene una iniciativa política mínima y ha quedado relegado de las negociaciones de investidura. Los votantes de izquierda, lejos de transmitir su deseo de corregir ese resultado electoral, han alejado el sorpasso en la encuesta del CIS. Podemos se centra ahora en las elecciones vascas y gallegas del 25 de septiembre. No juegan a su favor las dificultades en Galicia para sellar la fórmula de concurrencia con las mareas, lo que está generando importantes tensiones.

Tras las generales de junio, dio carpetazo al análisis del fracaso electoral y no concluyó si la culpable había sido la alianza con IU, o bien el diseño de la campaña. En ese sentido, el portavoz de Economía de los socialistas en el Congreso, Pedro Saura, consideró acreditado en la encuesta que el PSOE “es la alternativa a Rajoy”, y destacó el descenso de Podemos, “debido a que los españoles progresistas castigaron a Pablo Iglesias por bloquear el gobierno de cambio que intentó Pedro Sánchez”.

En cuanto a la Comunidad Autónoma Vasca, el PNV se mantendría estable en el 1,2%, y EH Bildu aumentaría del 0,77% al 0,9%. En Catalunya, ERC sigue subiendo (del 2,63% al 2,9%), mientras que la antigua CDC disminuiría del 2,01% al 1,7%.