VITORIA - El bloqueo en que se halla inmerso el proceso soberanista catalán no ilusiona a la ciudadanía vasca. Solo dos de cada diez ciudadanos, un 19,6% de los encuestados, estarían a favor de mimetizar la hoja de ruta independentista que lideran Junts pel Sí y la CUP en Catalunya, y es que la ausencia de un pacto para investir president a Artur Mas no ayuda a que el escenario goce de adeptos en la CAV para dar salida a un mayor nivel de autogobierno o poner en práctica el derecho a decidir. Es bien conocida la postura mantenida por los partidos abertzales al respecto, con un PNV que promulga el diálogo y la negociación para dotar a Euskadi de un nuevo estatus jurídico y político, mientras que EH Bildu llama a sumarse a la declaración unilateral para la ruptura. En el otro lado de la balanza se sitúa Podemos, que maneja la opción de una consulta legal y acordada con el Estado español, opción que comparte Ezker Anitza-IU. Entre los partidos unionistas, el PSE lanza la oferta de la reforma constitucional para satisfacer las ansias nacionalistas, al tiempo que PP y Ciudadanos no contemplan modificaciones y apuestan por reforzar la soberanía española.

La parálisis en la gobernabilidad del Ejecutivo catalán conduce a un 63% de la población vasca a no querer imitar en ningún caso los pasos que se están adoptando en suelo catalán, y que amenazan con suspender su autonomía o, como ya ha sucedido, a la fiscalización de su economía obligando a cumplir una serie de exigencias para cobrar el montante correspondiente al Fondo de Liquidez Autonómica. Una respuesta desde Madrid que atemoriza. El 17,4% de interpelados se aferra al no sabe/no contesta al ser preguntado por hacer o no seguidismo al procés. Por herrialdes, son los alaveses quienes ponen más reparos a embarcarse en el camino de Catalunya, con un 70,2% de rechazo, mientras que en Bizkaia se atora en el 63,7% y en Gipuzkoa la oposición se detiene en el 58,7%. Por franjas de edad, la negativa a copiar la agenda del secesionismo catalán es mayor entre los ciudadanos de entre 46 y 60 años, mientras que solamente es del 48,1% entre aquellas personas que tienen 18 y 29 años.

mayor crítica hacia madrid Paralelamente, los ciudadanos vascos suspenden las acciones y actitudes procedentes tanto de la Generalitat como del Gobierno español, aunque en este segundo caso la censura a su gestión es todavía mayor. Los sondeados por Gizaker encuestas otorgan una nota de 3,6 al Ejecutivo de Artur Mas, con un dato sorprendente: un 23,6% le azota con un rotundo 0, y es que únicamente el 33,4% de quienes han respondido a esta cuestión aprueban al Govern en funciones; entre ellos, un 10% le da una nota de 5, y un 7,1% le asciende hasta el 7. Son los jóvenes de entre 18 y 29 años quienes validan más el trabajo del Ejecutivo de Convergència, ya que le conceden un 4,91.

Mucha peor valoración recae en las filas del gabinete de Mariano Rajoy, que apenas alcanza un 2,27 sobre 10. En este terreno, hasta un 36,5% firma el 0 hacia la tarea del Gobierno del PP a la hora de tratar el desafío catalán, instalado en el inmovilismo y cuya postura no ha hecho sino acrecentar el número de independentistas. De hecho, solamente le aprueba el 18,3% de los encuestados.