BILBAO. El portavoz de Sortu, Pernando Barrena, ha defendido poner en marcha una "dinámica" social e institucional por el derecho a decidir y cree que abrir otro "frente potente en clave de país", además del catalán, sería "devastador para Madrid".

En una entrevista a Onda Vasca, recogida por Europa Press, ha indicado, en relación al proceso catalán, que hay "todo un país impulsando el proceso soberanista" y la sociedad civil catalana es la que está "al frente, muy por delante" de la clase política y va "marcando posiciones".

"Ir a Barcelona a pasar unos días es volver cargado de energía y cargar pilas", ha añadido. Barrena cree que los próximos meses van a ser "muy importantes para el futuro de este país" y considera que "la libertad de Euskal Herria también se juega en Cataluña en estos momentos" porque "la Constitución española es el mismo corsé, la que nos impide respirar a vascos y catalanes".

Barrena ha indicado que lo que está ocurriendo en Cataluña es "importantísimo" porque se "está hablando del deseo de un cambio de marco político en lo que se refiere a la estructuración del Estado", algo que, según ha destacado, "afecta realmente, de una manera clara, a los vascos".

PNV, "POSTURA INCOMPRENSIBLE"

A su juicio, el camino que recorra Cataluña "también lo va a hacer para los vascos" y, por ello, ve "incomprensible" la postura del PNV, que, ante un proceso "de primer orden, dice que los catalanes" van al "abismo" y que no son "nuestro referente". Además, ha denunciado que el PNV ha estado "alineado" estos días, con motivo de la Diada, con Unió, "que representa lo más conservador y cercano al españolismo dentro del catalanismo".

Barrena cree que es importante poner en marcha en Euskadi una "dinámica" social, política e institucional por el derecho a decidir y ha señalado que abrir "aquí otro frente potente en clave de país" sería "devastador para Madrid". "Aquí en Euskal Herria tenemos mayorías sociales, un contexto político de cambio en el Estado, Cataluña avanza a gran velocidad, vamos a aprovechar esa circunstancia, vamos a desplegar las velas cuando el viento sopla con fuerza", ha apuntado.

Por ello, según ha explicado, van a presentar una Ley de Consulta en el Parlamento vasco, que no es una "iniciativa contra nadie, ni para dejar en evidencia a nadie", sino que busca "aunar fuerzas y compromisos" para avanzar "hacia el ejercicio del derecho a decidir y la independencia".

Barrena cree que existe "cierto déficit" por parte de algunos partidos a la hora de "convertir esas mayorías sociales en favor del derecho a decidir en mayorías políticas y también en mayorías electorales".

En este sentido, el líder de Sortu ha vuelto a hacer mención al PNV y ha señalado que, "desde ese espacio político se mira más a qué puede pasar en Madrid y, si vamos a poder tener alguna especie de juego político con Madrid que nos permita avanzar en esas coordenadas".

"Ese es un análisis totalmente falso y que no parte de ningún dato objetivo que nos permita pensar que eso puede ser así. Estamos viendo lo que esta pasando en Cataluña y la negativa, no ya solo a negociar contenidos políticos, sino a abrir cualquier tipo de diálogo, es evidente", ha apuntado.

Por lo tanto, ha manifestado que "nada hace pensar que desde Madrid puedan venir posiciones de diálogo, de entendimiento" y eso "nos obliga a recontar efectivos aquí en casa, entre las fuerzas que disponemos, para ver qué podemos hacer en los próximos tiempos".

"Queremos buscar cauces de colaboración con otros sectores políticos y sociales para lanzar un camino como país hacia adelante que dependa única y exclusivamente de nuestras fuerzas y de nuestra voluntad", ha añadido. Barrena cree que, "sin soberanía y sin independencia, no hay posibilidades de cambio ni de justicia social", aunque no considera que "la independencia lo solucione todo".

Por último, ha calificado de, "como poco, sorprendentes" las palabras del líder de Podemos, Pablo Iglesias, que, durante la campaña electoral catalana, apeló al voto a los catalanes con origen en otras comunidades.

A su juicio, es "muy preocupante" que se hagan este "tipo de apelaciones al origen de los ciudadanos de un país para que decanten su voto en una u otra dirección". Según ha señalado, que los que se sienten "indignados" con ese discurso son los propios ciudadanos "de segunda o tercera generación con origen en otros lugares del Estado y que son ciudadanos catalanes de pleno derecho".