GASTEIZ. Un total de 97 desfibriladores se encuentran en Araba; 331 en Bizkaia y 191 en Gipuzkoa, según ha informado hoy en una nota el Departamento vasco de Salud.

Todos ellos están inscritos en el Registro Vasco de Desfibriladores que se creó con la aprobación del decreto, lo que permite tener un control exhaustivo de todos los existentes.

El Departamento de Salud ha recordado que el objetivo de esta medida es aumentar el número de vidas que se pueden salvar en los casos de paradas cardiorrespiratorias ya que el único tratamiento eficaz contra la fibrilación ventricular es la desfibrilación eléctrica precoz.

El consejero de Salud, Jon Darpón, ha destacado la importancia de esta normativa "que es un reflejo del compromiso del Gobierno Vasco con las personas y con la protección de su salud" ya que la utilización de los desfibriladores puede ayudar a aumentar las expectativas de supervivencia de una persona ante una parada cardiorrespiratoria mientras llegan los servicios de emergencia.

A partir de febrero es obligatoria la disponibilidad de desfibriladores externos y semiautomáticos en los grandes establecimientos comerciales, aeropuertos y puertos comerciales, estaciones de autobuses o ferrocarril de poblaciones de más de 50.000 habitantes y en estaciones de metro, tren o autobús con afluencia media diaria superior a 2.000 personas.

También deben colocarse en establecimientos públicos, instalaciones, espectáculos y actividades recreativas con aforo superior a 700 personas y en los centros educativos con más de 2.000 personas.

Para cumplir con esta exigencia, el decreto contempló un plazo de doce meses y el Departamento de Salud trabaja para que el 5 de febrero de 2016 todos los espacios públicos que tienen que contar con desfibriladores lo tengan instalado.