gasteiz - Con la culminación del Mapa de la Memoria en el horizonte, la Secretaria General de Paz y Convivencia presentó ayer el informe que detalla las vulneraciones del derecho a la vida en las tres capitales de la CAV, una herramienta con la que el Gobierno Vasco da respuesta a la demanda de los municipios y en la que se enumeran los 262 casos protagonizados por grupos terrorista y fuerzas de seguridad desde 1960 hasta 2010.

El responsable de este área gubernamental en el Ejecutivo autonómico, Jonan Fernández, expuso en el Parlamento Vasco el trabajo que bajo el título Retratos municipales de las vulneraciones del derecho a la vida completa un pormenorizado repaso que a partir de ahora servirá de base a los Ayuntamientos de Vitoria, Bilbao y San Sebastián para ultimar de la forma en la que consideren oportuno el recuerdo a estos damnificados por la violencia. El objetivo es que esta “herramienta útil” facilite el aumento de los actos de reconocimiento que ya este año en el Día de la Memoria llegaron a 22 municipios, un número en apariencia reducido pero que representa al 57% de la población vasca, según destacó Fernández en su comparecencia parlamentaria.

El secretario general del Paz y Convivencia matizó que el informe presentado en sede legislativa no es un documento “cerrado ni acabado”, dadas las dificultades para avanzar que plantean algunos de los casos, aunque sí defendió la funcionalidad general de los datos recogidos -en el 95% de los casos son “concluyentes”, añadió- y el impulso que puede suponer para el trabajo municipal.

El hecho de defender esta propuesta en la Cámara vasca no fue óbice para que Fernández reprochara a los grupos que conforman esta institución una falta de acuerdo que “precede” a la distancia que han mantenido las fuerzas políticas en los diferentes ayuntamientos y que ha impedido la adhesión a iniciativas destinadas a recordar la memoria de las víctimas.

En este sentido, animó a las bancadas del Legislativo a minimizar las diferencias que desde el nacimiento del Mapa de la Memoria, en la anterior legislatura, han impedido un mayor despliegue de estas iniciativas.

Fernández resumió el trabajo desarrollado en este texto como “un paso adelante para enfrentarnos al pasado y desarrollar una política memorial”. “Una memoria que mantenga vivo el recuerdo de las víctimas y que proyecte al presente y al futuro un compromiso definitivo con los derechos humanos”, agregó.

En los tres tomos correspondientes a cada una de las capitales, el Gobierno Vasco ha incluido tanto a las víctimas asesinadas en el término municipal como a las que fallecieron en otros lugares pero eran oriundos o residentes de la entidad local en cuestión.

En lo que se refiere al contenido estricto de esta herramienta, el Gobierno Vasco se ha apoyado en datos procedentes de diferentes administraciones, los listados públicos sobre víctimas de los gobiernos de Euskadi, Navarra y del Ministerio del Interior, así como en informaciones periodísticas para completar esta “tarea de síntesis”.

El resultado es un fichero “exhaustivo” que ofrece, según destacó Fernández, una imagen “muy aproximada y rigurosa de la realidad”, ya que por primera vez se recogen “todas las vulneraciones del derecho a la vida”.

información detallada En cada una de las fichas que aglutinan los tomos figuran los datos personales de la víctima (nombre, edad, lugar de nacimiento), así como su profesión, el autor de la muerte, el lugar en el que falleció, el procedimiento empleado y si hubo más víctimas mortales en esa misma acción.

De cara al próximo año, Fernández avanzó el plan de trabajo en materia de memoria y reconocimiento de víctimas en el ámbito municipal acordado con la asociación de municipios vascos, Eudel.

En este contexto, cobra especial importancia la labor que se realizará entre septiembre y noviembre para impulsar la realización de actos memoriales en todos los municipios mayores de 10.000 habitantes y en todas las cabeceras de comarca.

A través del “contacto directo” con estas instituciones y “el contraste con los familiares”, la intención de la Secretaría de Paz y Convivencia es promover la realización de actos de memoria de cara a sumar al mayor número de municipios participantes posibles en el Día de la Memoria que, como cada año, se celebrará el 10 de noviembre.