BILBAO. El portavoz del Gobierno vasco, Josu Erkoreka, considera "positivo" y un "avance" el pronunciamiento del colectivo de presos de ETA (EPPK), pero cree que esta declaración se debe traducir en "hechos" y darse más pasos, entre ellos el desarme y la disolución de ETA. Asimismo, Erkoreka, que ve "limitado" el reconocimiento del daño que hace este colectivo, ha apelado al Gobierno central a "modificar su estrategia penitenciaria" si se constata que "lo comprometido" se "traduce en hechos concretos".
En una comparecencia en Bilbao, se ha referido, de esta manera, al comunicado de EPPK en el que reconoce el sufrimiento y daño multilateral generados" como consecuencia del conflicto y se muestran dispuestos a estudiar la posibilidad de que el proceso que culmine "con la vuelta a casa" se efectúe "de manera escalonada, mediante compromisos individuales y en un tiempo prudencial".
Erkoreka, que ha apelado a la prudencia a la hora de valorar el comunicado, cree que es un "avance" que los presos asuman "la legalidad penitenciaria, la reinserción individualizada" y reconozcan el daño causado, aunque, en este caso, considera que ese reconocimiento es "muy limitado y parcial".
"DECLARACIONES EN HECHOS"
En todo caso, cree "imprescindible" que este colectivo debe traducir "las declaraciones en hechos" y llevar a cabo actuaciones concretas que doten de credibilidad "a su compromiso" y contribuyan "real y eficazmente al futuro de paz y convivencia"". Asimismo, le ha pedido a EPPK que convierta este "paso -positivo, sin duda,-" en el "primero de una serie de pasos unilaterales" que tendrá que dar en el futuro, incluyendo, entre ellos, el desarme y la propia disolución de ETA.
"No puede quedarse en una declaración aislada, si tiene valor va a ser porque sea el primer paso de una serie ulterior de pasos, también unilaterales, en la misma dirección, en la dirección del desarme y la desaparición definitiva de ETA", ha apuntado.
Erkoreka ha indicado también que el Ejecutivo vasco quiere hacer "abstracción expresamente de las consideraciones políticas que se incluyen en el documento, así como en los condicionamientos procedimentales que salpican el documento".
"De ambos hay presencia palpable en el documento pero el Gobierno considera que es mejor hacer abstracción de todo ello y dejar al margen ese tipo de consideraciones poniendo en valor lo que constituye un dato positivo: la asunción por parte del colectivo de la legalidad penitenciaria, de su reinserción individualizada y el reconocimiento del daño causado, aunque el daño está reconocido de manera limitada y parcial", ha agregado.
Por otra parte, ha señalado que el Gobierno español tiene una "buena oportunidad" para "tomar nota de lo que sucede aquí" y debería "modificar su estrategia penitenciaria en la medida en que se pueda constatar que lo comprometido por el colectivo de presos se traduce en hechos concretos y efectivamente esta asunción de la legalidad penitenciaria se convierte en realidad y se constata todos los días que esto es así".
A su juicio, el reconocimiento del daño causado y la asunción de los procesos individualizados de reinserción debe ser "algo real, constatable y efectivo en las instalaciones penitenciarias".