El Cairo. El pulso entre las nuevas autoridades egipcias, comandadas por el Ejército, y los islamistas continúa en Egipto en una escalada del conflicto que comenzó hace una semana y que tiene al país al borde de la guerra. Represión y arrestos por un lado y atentados de yihadistas y quema de iglesias coptas, por otro, forman parte de esa violencia diaria en la que se ha sumergido el país. En un nuevo golpe contra los islamistas, las autoridades detuvieron la madrugada de ayer al guía espiritual de la Hermandad, Mohamed Badia, en paradero desconocido desde hace más de un mes. Badia, que está siendo investigado por la supuesta incitación a la violencia y la muerte de manifestantes, fue arrestado en el distrito de Ciudad Naser, en El Cairo.
El líder de los Hermanos Musulmanes fue enviado a la prisión de Tora, en el sur de la capital egipcia, donde se encuentran otros dirigentes islamistas arrestados recientemente. La Fiscalía egipcia ha ordenado su prisión provisional por quince días y el Tribunal de Apelación ha fijado para el próximo domingo el inicio del juicio.
Tras el arresto de Badia, la Hermandad nombró un nuevo guía espiritual de manera interina. Se trata de Mahmud Ezat, un médico de la línea dura islamista que hasta ahora estaba considerado como un líder en la sombra de la cofradía. Aunque no sea una de las caras más conocidas de la Hermandad, Ezat, que era uno de los viceguías espirituales del grupo, tiene fama en Egipto de ser quien tomaba muchas de las decisiones importantes durante el mandato de Mohamed Badía.
detenciones La detención de Badía se suma a la de al menos 400 dirigentes del grupo en los tres días anteriores, denunció la cofradía, que acusó nuevamente a las autoridades egipcias de haber torturado y calcinado a 36 detenidos cuando eran trasladados el domingo a una prisión. Asimismo, los islamistas llamaron ayer a la desobediencia civil contra los golpistas y aseguraron que continuarán sus actos de apoyo al presidente despuesto, Mohamed Mursi. Los seguidores de los Hermanos Musulmanes llevan manifestándose cada día desde el pasado viernes, aunque el cerco policial, militar y civil está limitando sus movimientos.
La llamada Alianza para la Defensa de la Legitimidad, que incluye a la Hermandad y a otros grupos afines, explicó ayer en una rueda de prensa que la campaña de desobediencia civil incluye el boicot a los medios de comunicación partidarios del golpe militar. La coalición llamó, asimismo, a boicotear las compañías y los productos de aquellos países que financian el golpe, entre los que se encuentran Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos y Kuwait, que concedieron ayudas por valor de al menos 1.200 millones de dólares para que Egipto supere la crisis económica tras la destitución de Mursi. Asimismo, Riad prometió el lunes compensar una posible pérdida de apoyo de algunos países occidentales. "Quienes anunciaron o amenazan con recortar su ayuda a Egipto deben saber que los Estados árabes e islámicos son ricos y no dudarán en ayudar a Egipto", señaló el ministro de Exteriores saudí, el príncipe Saud al Faisal. No es ninguna coincidencia que el rey saudí Abdulá fuera el primer jefe de Estado en felicitar al presidente interino, Adli Mansur, tras el derrocamiento de Mursi. Y es que los Hermanos Musulmanes está considerada por los monarcas árabes como una amenaza para sus propias aspiraciones. Éstos propugnan un modelo contrario a las monarquías hereditarias y aspiran a estar al servicio de Alá, una idea atractiva para muchos jóvenes árabes del Golfo.
Israel Otro país que se muestra a favor del Ejército egipcio es Israel. El lunes, un alto cargo israelí que pidió no ser identificado señaló que "el único actor en Egipto que puede restablecer la estabilidad y la paz social es el Ejército, no hay otro. No hay alternativa. Sin apoyar necesariamente lo que ha pasado, está claro que el único elemento que puede establecer algún tipo de orden es el militar". El primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, que ha condenado el golpe militar, fue ayer más allá y acusó a Israel de estar detrás de él. "Detrás del golpe (del 3 de julio) en Egipto está Israel. Disponemos de documentos", apuntó. Las autoridades israelíes declinaron hacer comentarios al respecto.
"Ni tan siquiera vale la pena responder a este comentario, que está por debajo de merecer respuesta", manifestó un portavoz del Ministerio de Exteriores israelí. Y mientras, los ministros de Exteriores de la Unión Europea se reunirán hoy en Bruselas para hallar una posición común: se debatirá desde una interrupción del suministro de armas hasta el bloqueo de las previstas ayudas, pasando por el cese del flujo de los créditos. "Y no será fácil", reconoció el enviado especial de la UE a Egipto, Bernardino León.
La madre de uno de los policías asesinados el lunes en el Sinaí. Foto: AFP