Madrid. El mensaje de la dirección del PP a los barones díscolos que se quejas de los planes de déficit asimétrico para las Comunidades Autónomas no puede ser más claro: no se permitirán rebeliones. La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, fue la encargada de trasmitirlo ayer en el transcurso de la XIX Conferencia Interparlamentaria que la formación de Rajoy celebró ayer en Salamanca. Cospedal llamó a la unidad y ordenó a todos los presidentes autonómicos populares a apoyar al Gobierno y sus decisiones.

La número dos del PP aseguró que en el partido puede haber opiniones diversas, pero "no es negociable" el objetivo de la recuperación y "apoyar al Gobierno de España para sacar el país adelante". "De todo se habla y de todo se negocia" porque "eso es la política", apuntaba, si bien insistió en que "hay cosas innegociables", entre las que también ha citado el "principal objetivo" que deben tener todos en el PP, que es la creación de empleo.

habrá pacto La secretaria general se mostró en cualquier caso convencida de que, al final, habrá consenso. Así, aseguró que habrá acuerdo "en todo aquello que haya que cumplir para garantizar la recuperación de las comunidades autónomas y de toda España".

Cospedal no fue la única en hacer este llamamiento a los barones, pues también se unió al mensaje el vicesecretario general de Política Autonómica y Local, Javier Arenas. Arenas pidió a todo el partido que esté "a la altura de las circunstancias" en un momento como el actual, algo que, advertió, es imposible "si no se tiene altura de miras". El dirigente popular recurría, de esta manera, a la misma expresión utilizada por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, para dirigirse a los presidentes autonómicos de su partido críticos con el asunto del déficit.

Tras insistir en reclamar unidad, que es "la seña de identidad" de los populares, y aclarar que eso no significa que tenga que haber "uniformidad", Arenas instó a todos a poner dicha unidad "al servicio del proyecto reformista de Mariano Rajoy".

claridad Por otra parte, María Dolores de Cospedal hizo un llamamiento a los parlamentarios de su partido -en esta cita estaban representados ñps diputados del Congreso, senadores, diputados autonómicos y parlamentarios europeos- para que sigan esforzándose en defender las reformas del Gobierno. Unas medidas con las que, aseguró, ha quedado "desterrada la posibilidad de una intervención a España".

Según destacó ante los suyos, el camino elegido por Rajoy, su Gobierno y el PP es "seguramente el más difícil, pero es el camino necesario" y "seguramente el más empinado, pero es el que nos lleva a la creación de expectativas y empleo y a la recuperación económica". También reconoció que dicho camino puede ser "el más incomprendido", y por eso instó a todos los populares a explicarlo, y estar con los ciudadanos "en la calle". "A algunos no les gusta que estemos en la calle pero no nos van a sacar, porque nuestro Gobierno lo que está haciendo es trabajar por España" arengó.

Asimismo, María Dolores de Cospedal insistió en ese esfuerzo de comunicación en este momento en el que "hay muchos ciudadanos que dan la espalda a la política", a los que hay que demostrar, en su opinión, que la acción del Gobierno "está sirviendo para mucho y va a servir para más".