"Llámenme un optimista desesperado, pero todavía creo que se puede llegar a un acuerdo", ha afirmado el presidente de EE UU, Barack Obama, en una breve comparecencia en la Casa Blanca ante los medios para explicar el avance en las negociaciones con los republicanos sobre el denominado 'precipicio fiscal'.Obama ha explicado que se ha reunido este viernes con el portavoz de la Cámara de Representantes, el republicano Jim Boehner, y con el líder de la mayoría en el Senado, el demócrata Harry Reid, a quienes expresó su "disposición" para firmar un acuerdo bipartidista al regreso de las vacaciones navideñas antes de la fecha límite de final de año. "Espero que las vacaciones le den a todo el mundo algo de perspectiva", afirmó.

"Gobernar es una responsabilidad compartida y en una negociación nadie consigue el 100% de lo que se quiere. Todos debemos ceder un poco para que nos movamos juntos hacia delante... o no nos movamos en absoluto", aseguró el líder demócrata.El presidente estadounidense advirtió de que el país está a "diez días de una tragedia", en referencia al "precipicio fiscal", e instó a un acuerdo bipartidista.

"Justo cuando vemos que la economía comienza a dar signos de mejoría, no es el momento de más heridas autoinfligidas", afirmó.La temida combinación de recortes de gasto y subida de impuestos entrará en vigor el 1 de enero si las negociaciones entre ambos partidos no prosperan. "En 10 días vamos a afrontar una fecha límite", afirmo una Obama que sí reconocío que todos están "de acuerdo en que los impuesos no deben subir para el 98% que menos gana".

El presidente lamentó las truncadas negociaciones hasta ahora, y señaló que en estos momentos "los ciudadanos muestran más sentido de la responsabilidad que sus representantes". No obstante, se mostró esperanzado en que se pueda alcanzar un pacto la próxima semana, cuando a partir del 27 de diciembre los legisladores regresen a Washington."Váyanse de vacaciones, coman galletas, canten villancicos... y piensen en las obigaciones que tenemos y en las dificultades de los estadounidenses si no hacemos nada. Feliz Navidad y como no hemos legado a un acuerdo.. os veo la semana que viene", zanjó el presidente antes de partir para sus vacaciones navideñas con la familia a Hawai.

Fracaso del 'plan B' de Boehner

La comparecencia de Obama se produce después del fracaso anoche del llamado "plan B" de Boehner, ideado como alternativa al del presidente estadounidense para evitar el precipicio fiscal, tras no encontrar apoyos suficientes de su partido. Este plan contemplaba la subida de impuestos para aquellos hogares con ingresos anuales de más de un millón de dólares.

La expiración de la exención impositiva para la mayoría de los estadounidenses es el principal escollo de la negociación, ya que Obama plantea que se prorrogue para la clase media, pero no para los hogares que ingresan más de 400.000 dólares.Los republicanos, a su vez, se oponen a cualquier subida de impuestos, incluso para las rentas más altas, con el argumento de que daña la inversión privada. De no llegar a un acuerdo antes de fin de año, se calcula que las familias de clase media afrontarían un aumento promedio de impuestos de 2.200 dólares anuales en 2013.