La división de la clase política vasca vuelve a desinflar la celebración del Día de la Memoria

La desunión manifiesta tanto en 2010 como en 2011 a través de la incapacidad de las diferentes corrientes políticas de unificar el recuerdo a las víctimas seguirá vigente. Pero en esta ocasión ni siquiera existirá un intento para sumar a todas las fuerzas debido a que la proximidad con las últimas elecciones autonómicas mantiene vacío el Parlamento Vasco.

Tres son los actos de carácter autonómico que se celebrarán el sábado. Por un lado, el Gobierno Vasco recordará a las víctimas en sendas iniciativas en la Academia de Arkaute y Ajuria Enea, mientras que el Parlamento Vasco repetirá su particular recuerdo a las víctimas, incluidas las de abusos policiales, en un acto cuya convocatoria por parte de la presidenta de la Cámara, Arantza Quiroga, fue suficiente ayer para incendiar los ánimos de otras fuerzas.

PSE y EH Bildu coincidieron en criticar la unilateralidad de una medida de la que tuvieron constancia a través de los medios de comunicación, según apuntaron. Los socialistas valoraron que Quiroga, con su proceder, se despedirá del Legislativo "jugando a política", mientras que en la bancada aber-tzale denunciaron la "imposición de sus criterios" que asocian a la forma de encabezar la institución de la dirigente popular.

A la falta de que se constituya el Parlamento, Presidencia invitará solo a los miembros de la Diputacíon Permanente, a pesar de que con excepción del PP los 65 parlamentarios restantes ya habrán recogido sus respectivas actas parlamentarias para el sábado.

El Ejecutivo de Patxi López celebrará por partida doble la jornada. La Academia de la Ertzaintza en Arkaute recordará, por un lado, a los policías muertos en actos terroristas con una ofrenda floral en el monolito erigido -el pebetero se apagó tras el cese de la actividad armada anunciado por ETA- para tal fin.

Por otro lado, el lehendakari encabezará un acto "exclusivamente de gobierno" en los jardines de Ajuria Enea, al igual que el ejercicio anterior. En él, Patxi López recordará en un discurso "a todas las víctimas de vulneración de derechos humanos", según apuntó ayer la portavoz de su Gabinete, Idoia Mendia. Una intervención que compartirá protagonismo con las últimas palabras en un acto oficial de Maixabel Lasa en su condición de directora del servicio de Atención a las Víctimas.

El tercer acto, el que tendrá lugar en el Parlamento Vasco, consistirá en una ofrenda floral y la colocación de un pebetero, y para el mismo se invitará a los miembros de la Comisión Permanente.

No obstante, las palpables divergencias ponen en duda la participación de los miembros de este órgano que representa a las diferentes bancadas a la espera de que, probablemente dentro de dos semanas, se constituya el nuevo Pleno.

La historia de la división se repetiría, aunque en el caso del pasado año fue el lema escogido por la presidenta de la Cámara en la corona floral, haciendo alusión únicamente a las víctimas del terrorismo y dejando al margen al colectivo damnificado por los abusos policiales, el germen de la polémica. PNV, Aralar, EA y EB se desmarcaron de la iniciativa impulsada por Quiroga y colocaron su propio ramo en recuerdo de todas las víctimas.

Además de estos actos, en el plano territorial también existen diferentes pareceres a la hora de determinar cómo se debe recordar a estas víctimas. Las instituciones vizcaínas unificarán sus iniciativas en un acto que tendrá lugar en el parque de Doña Casilda, a tenor de una información de Europa Press, mientras que en el caso de Gipuzkoa, las Juntas Generales repetirán su ofrenda floral del pasado año, aunque en esta ocasión solo en su nombre y no junto a la Diputación guipuzcoana, como ocurrió en 2011.

En Álava, fuentes de las Juntas Generales, presididas por el popular Juan Antonio Zárate, apuntaron a la probabilidad de organizar un acto, aunque destacaron que aún no está decidido. Sí protagonizarán una convocatoria conjunta Diputación y Ayuntamiento de Gasteiz.