Todos los sindicatos con representación en el sector de la Intervención Social de Álava han unido sus fuerzas para intensificar las movilizaciones en protesta por la negativa de los gobiernos del PP del Ayuntamiento de Vitoria y de la Diputación a negociar un convenio del sector.

Los trabajadores de Intervención Social de Álava han celebrado esta mañana una asamblea en el centro cívico Aldabe de Vitoria y posteriormente han formado una cadena humana en forma de cortejo fúnebre que, tras recorrer varias calles, ha llegado a la plaza de la Provincia, donde se encuentra la sede de la Diputación.

Tras una pancarta en la que se leía "Servicios Sociales de Calidad" y las siglas de los sindicatos UGT, ELA, CCOO, LAB y ESK, los manifestantes han coreado gritos contra el PP y a favor de un convenio digno.

Este colectivo, integrado por unas 800 personas, trabaja en empresas subcontratadas por el Ayuntamiento y la Diputación dedicadas principalmente a la atención de centros de salud mental, discapacidad física y psíquica y menores desprotegidos, entre otros sectores relacionados con la integración social.

Los empleados carecen de un convenio colectivo en Álava, lo contrario que ocurre en Bizkaia y Gipuzkoa, según ha explicado a Efe Hibai Ollora, uno de los portavoces del sindicato ELA.

Ollora ha lamentado que los gobiernos municipal y foral se "cierren en banda" para negociar un convenio y ha denunciado la congelación de sueldos que sufren los trabajadores desde hace tres años y la pérdida de calidad del servicio que se presta como consecuencia de la reducción de, entre un 7 y un 9 por ciento, de los presupuestos que el Ayuntamiento y la Diputación dedican a contratar a las empresas del sector.

El portavoz sindical ha recordado que, al no existir un convenio del sector en Álava, las condiciones salariales y laborales de los trabajadores son muy diferentes, de ahí la necesidad de un acuerdo provincial que regule estos aspectos.

Ha señalado además que los partidos políticos, excepto el PP, y las empresas del sector han expresado a los sindicaos su voluntad de lograr un convenio.

A partir de ahora los trabajadores intensificarán las movilizaciones aunque por el momento no se han planteado convocar una huelga. EFE