Vitoria. La radiografía de la situación de la vivienda pública en Vitoria difiere mucho de la que presentan Bilbao y Donostia. La construcción de VPO en las capitales vizcaína y guipuzcoana ha mantenido y sigue manteniendo un ritmo mucho más comedido que en la alavesa, un factor que tras el estallido de la crisis y el cerrojazo de los bancos a la concesión de créditos hipotecarios ha provocado comportamientos diferenciados tanto en el mercado inmobiliario público como en los adjudicatarios de cada territorio. Erradicados los sorteos por la ausencia de demanda, en la capital alavesa se impone ahora el sistema de permutas, por el cual un beneficiario de una VPO puede intercambiar la que le ha tocado en suerte por otra de diferente ubicación, tamaño o precio. En la actualidad, esta bolsa de permutas que gestiona el Departamento vasco de Vivienda cuenta con 678 domicilios radicados en Vitoria, mientras que únicamente oferta 206 en Bilbao y 299 en Donostia. Un análisis del fenómeno por territorios pone en evidencia la consabida macrocefalia alavesa, ya que el primer territorio en orden de relevancia dentro de la citada bolsa de intercambio es Gipuzkoa, con un 35,5% de las viviendas, seguida de Álava con un 35,4% y de Bizkaia, que cierra el listado con un 29,1%.
A noviembre de 2011, la bolsa de intercambio de VPO estaba integrada por un total de 2.046 personas interesadas en intercambiar sus viviendas protegidas dentro de la CAV. 727 se ubican en Gipuzkoa, 724 en Álava y 595 en Bizkaia. La oferta alavesa se centra casi exclusivamente en la capital, que aglutina la tercera parte de todas las disponibles en Euskadi. En el resto de la provincia sólo hay disponibles 46 pisos repartidos por 14 municipios. Nada que ver con Bizkaia, donde al margen de los 206 de Bilbao destacan los 116 de Barakaldo, o con Gipuzkoa, donde, por ejemplo, Errenteria oferta 56 domicilios intercambiables e Irun 53.
gran tamaño Una de las principales características de los pisos que se ofrecen en intercambio dentro del territorio es su gran superficie. De acuerdo con los datos facilitados por el Observatorio Vasco de Vivienda, "se comprueba una mayor concentración de viviendas de tamaño superior en Álava, puesto que el 37% supera los 70 metros cuadrados, frente al 24% en Bizkaia y el 30% en Gipuzkoa.
Ahondando en esta misma línea de análisis, el Observatorio explica que, centrándose en los extremos, los datos ponen de relieve un predominio de las viviendas de tamaño más reducido en Bizkaia, "donde el 44% de las viviendas que optan a la permuta alcanzan como máximo los 60 metros cuadrados de superficie útil frente al 31% en Gipuzkoa y al 18% de Álava". El documento también revela que el 28,5% de los propietarios de vivienda protegida que desean cambiar de piso en Álava ocupa actualmente una de 85 metros cuadrados o más. Una proporción que cae al 16% en Gipuzkoa y al 9% en Bizkaia.
Otro detalle que caracteriza a las viviendas inscritas en la bolsa de permuta es que la mayoría cuenta con garaje y trastero, un 91% en ambos casos. La vivienda tipo predominante susceptible de ser intercambiada en la CAV dispone de un sólo baño (64% del total) y con dos habitaciones (56%). Únicamente un 11% de estos domicilios tiene una sola habitación y un 33% cuenta con tres dormitorios. 208 de los pisos ofrecidos, el 10%, están adaptados para personas con movilidad reducida.
necesidades cambiantes La memoria de permutas en viviendas de protección pública de Euskadi que ha elaborado el Observatorio Vasco de la Vivienda explica que la bolsa de intercambio viene a satisfacer las demandas de las familias vascas que, con el paso del tiempo, sufren importantes cambios en sus necesidades habitacionales. Una realidad que lleva a las familias beneficiarias a plantearse dos opciones. En primer lugar, pueden poner su piso a disposición del organismo público competente y, en caso de necesidad, venderla y acudir al mercado libre. Una opción que, según indica el documento, "requiere la disposición de los recursos suficientes para afrontar el pago de una vivienda en el mercado libre, lo cual resulta inviable para buena parte de los propietarios de vivienda protegida". "Por otro lado -añade- pueden optar por realizar una permuta con otra persona propietaria de una VPO que esté interesada en cambiar de vivienda".
El Departamento vasco de Vivienda facilita la operativa del intercambio ofreciendo asesoría a los interesados y sirviendo de guía a lo largo de todo el proceso.