vitoria. La vida es cada vez más dura para los inmigrantes que llegan a Álava en busca de una vida mejor. La crisis ha golpeado de lleno a este colectivo, que cada vez ve más complicado acceder a un trabajo. Sin empleo regular resulta más que complejo entrar a residir en una vivienda con todas las de la ley e iniciar la cadena burocrática que permite obtener el padrón y, en consecuencia, la tarjeta de residencia, amén de otras tan necesarias como la sanitaria. De acuerdo con los datos contenidos en el Plan Foral de Inmigración de Álava, el aumento de la población inmigrante durante la última década ha sido paulatino y en la actualidad se sitúa en torno a las 27.000 personas. La mayoría de ellos cuenta con la preceptiva tarjeta de residencia, si bien se estima que existe un porcentaje del 19,2% que está empadronada pero sin tarjeta de residencia y un 6,7% de la población inmigrante que carece tanto de tarjeta como de padrón. Así las cosas, más de 5.000 inmigrantes únicamente están empadronados y cerca de 2.000 no disponen de ningún papel oficial. Según las estimaciones realizadas por el ente foral, la tasa de mujeres extranjeras que no disponen de tarjeta de residencia pero están empadronadas es del 21,6%. Esta proporción entre los hombres asciende al 17,2%.

En lo que al mercado laboral atañe, la población extranjera afiliada a la Seguridad Social en Álava pasó de representar el 1,5% en el año 2000, a constituir el 7,8% de la mano de obra del territorio en septiembre de 2008. Durante los años de bonanza económica, el colectivo sustentó parte del crecimiento del territorio, pero la llegada de la crisis se ha cebado especialmente con la inmigración en forma de tasas crecientes de desempleo. La proporción de personas extranjeras paradas ha pasado del 10,3%, del total de personas inscritas, a ser actualmente del 18,4%.

El informe que maneja la Diputación subraya que la aportación económica realizada por la población inmigrante es "netamente positiva". "Consume servicios públicos de una forma proporcional a su número pero, en porcentaje, contribuye más a la financiación de dichos servicios que la población local", puntualiza en este sentido.

trabajos poco deseados La población inmigrante cubre principalmente los puestos de trabajo menos deseados por la población local. Casi el 80% de trabajadores dados de alta en la Seguridad Social en el régimen agrario son extranjeros. En el régimen de empleados del hogar, este porcentaje es del 57%.

El 48,5% de los contratos relacionados con la construcción son realizados a personas de origen extranjero. De cada tres extranjeros afiliados a la Seguridad Social, una es mujer, lo cual arroja un total de 4.233 féminas. De ellas, el 20%, se encuadra en el régimen de empleadas de hogar. Dado que este sector es especialmente proclive a crear bolsas de empleo sumergido, el informe de la Diputación supone que la cifra real de mujeres extranjeras que trabajan en tareas de cuidados personales o servicio doméstico es mucho mayor. La hostelería y la construcción, tanto por cuenta propia como ajena, ocupan al 41% del colectivo inmigrante.

origen y distribución La macrocefalia del territorio influye en la distribución de la inmigración con respecto a las cuadrillas. En Vitoria, la inmigración suponía hace dos años un 9,3% de la población total. Era seguida por Rioja Alavesa, con un 8,8%. En esta cuadrilla, más de la mitad de la población extranjera se concentra en tres núcleos: Oión, Labastida y Laguardia.

La cuadrilla de Salvatierra cuenta con un 7,2% de población inmigrante. La mayoría se concentra en los municipios de Agurain, Dulantzi y Asparrena. La cuadrilla de Campezo contaba con un 6,4% de población inmigrante. El 85,3% reside en los municipios de Campezo, Bernedo o Maeztu.

En la cuadrilla de Añana, un 4,9% de la población total es inmigrante. Más del 80% reside en Iruña Oka, Valdegobía, Lantarón y Ribera Alta. En Zuia suponen un 5,5% de la población total y casi el 80% de esta población se concentra en Zuia, Legutiano y Urkabuztaiz. En la cuadrilla de Aiala un 4,2% de la población total de la cuadrilla es inmigrante. Después de la capital alavesa es el municipio con mayor número de inmigrantes, aunque en peso específico es la que menos proporción de población extranjera tiene en relación a la autóctona. El colectivo se concentra básicamente en los municipios de Laudio y Amurrio.

En Álava, la población inmigrante es en su mayoría de origen latinoamericano, seguida de la europea y en tercer lugar de la africana, sobre todo de la zona del Magreb. Por países, Marruecos es el país con mayor número de población en el territorio, le sigue Colombia y a continuación Portugal, Argelia y Rumania.

Por sexos, predominan los hombres. El 45% de los inmigrantes son mujeres, porcentaje que se ha mantenido a lo largo de los últimos cuatro años. En cuanto a la edad, destaca la juventud del colectivo. "Es una inmigración reciente, más del 85% de las personas inmigrantes llevan residiendo en Álava menos de seis años", destaca el documento.