PAMPLONA. Así lo ha manifestado hoy a Efe el coordinador de ATTsF, Alfonso Torres, quien ha señalado que creen que en estos momentos no hay más cooperantes navarros en esa zona.

Según ha explicado, los cooperantes viven todos juntos en unos módulos y los secuestradores han entrado en uno de ellos y en otro no y Jiménez, casado y con tres hijos, "ha tenido la suerte de estar en el que no han entrado".

Los cooperantes secuestrados son la italiana Rossella Urru, del Comité Italiano para el Desarrollo de los Pueblos, y los españoles Ainhoa Fernández de Rincón, de la Asociación Extremeña de Amigos del Pueblo Saharaui, y Enric Gonyalons, cooperante de la ONG vasca Mundubat.

De hecho, según ha comentado Torres, el cooperante navarro, que había estado cenando con la italiana secuestrada, "salió un momento a hablar con su mujer y mientras hablaba con ella pasó todo".

Desde la organización navarra han podido contactar con su compañero quien les ha tranquilizado sobre su situación y la del resto de cooperantes que permanecen en los campamentos, un mensaje que éstos han trasladado a su familia que reside en Olite.

Según han sabido, en las últimas horas Jiménez, a quien se ha referido como "una persona experimentada", ha estado en contacto con la embajada española facilitándole información sobre el resto de cooperantes y la situación en la zona.

Al margen de la decisión que pueda tomar la embajada sobre repatriar o no a los cooperantes, Jiménez tenía previsto regresar el próximo jueves a Navarra.

En opinión de la Asociación de Trabajadores y Técnicos sin Fronteras, que lleva ocho años trabajando en el Sahara, lo sucedido ha sido "muy grave" y es que los secuestradores "han entrado con mucha violencia, a tiros".

La noticia ha causado una gran conmoción en la asociación navarra, ya que "para nada" tenían la sensación de que ése era un destino peligroso, según Torres, quien ha opinado que en el origen del secuestro hay cuestiones económicas y no políticas, ya que "saben que secuestrar a un cooperante es rentable y cuanto más ruido monten más rentable va a ser".

A su juicio, lo sucedido va a suponer "un antes y un después" en la cooperación en la zona, ya que si hasta ahora "había unas medidas de seguridad de perfil bajo, a partir de ahora las medidas serán de un perfil alto extremo".

La ATTsF es una asociación sin ánimo de lucro que nació en el año 2003 de la mano de un grupo de profesional de diversas ramas y con larga experiencia en el mundo de la cooperación.