GASTEIZ. La secretaria general de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo, ha descartado "totalmente" que la nueva cárcel de Araba, inaugurada este miércoles, tenga como finalidad acoger a presos de ETA procedentes de otras comunidades, ya que, según ha asegurado, únicamente albergará a los reclusos que se encontraban recluidos en el centro de Nanclares, incluidos los de la banda armada. "En Nanclares sólo hay presos de ETA que se han desmarcado o han sido expulsados de la organización, por lo que son personas fuera de esa organización y es complicado llamarlos presos de ETA", ha afirmado, al ser preguntada por la denuncia del Foro de Ermua, de que una sección de la cárcel de Alava acogerá numerosos presos de la organización. "No va venir ninguna oleada de internos de ninguna organización terrorista", ha subrayado.
Actualmente cumplen pena en Nanclares alrededor de una veintena de presos de ETA que se han desmarcado de la banda o han sido expulsados de ella.Respecto a si Instituciones Penitenciarias ha intensificado el control de los presos de ETA para evitar que tengan voz en un hipotético final de la banda, Gallizo ha aclarado que no hay ningún colectivo ni portavoces de presos de ETA como tal y ha explicado que son personas que están cumpliendo condenas por sus delitos, por lo tanto, cada cual debe tener libertad de pensamiento. No obstante, ha advertido de que el Gobierno no permite que las personas que siguen perteneciendo a una organización terrorista se organicen dentro de las cárceles.
Durante la inauguración de la cárcel que sustituirá a la anterior ubicada en el mismo muncipio de Nanclares de Oca, Gallizo se ha referido también a la petición de los integrantes del Acuerdo de Gernika para mantener reuniones con presos de ETA. La responsable de Instituciones Penitenciarias ha admitido que un grupo político "puede hacer lo que le parezca" y ha recordado que "en España los presos tienen derecho a recibir visitas de sus familiares y amigos" aunque "para ello, hay que seguir los trámites pertinentes".
La nueva cárcel de Zaballa (Araba) se abrirá a finales de este año con los internos que actualmente cumplen sus penas en Nanclares. Está ubicada a pocos kilómetros de la vieja prisión de Nanclares, la cual dejará de tener usos penitenciarios a principios de 2012, y es de tamaño "medio", con capacidad para albergar a unos 1.440 presos.
Los internos serán trasladados de manera progresiva a finales de año a la nueva cárcel, más moderna, segura y mejor dotada. Respecto a la nueva cárcel de Zaballa, ha opinado que el País Vasco se merecía tener una prisión como ésta y ha subrayado que sus instalaciones permitirán a los internos tener más posibilidades de inserción social y de recuperar su salud mediante la práctica deportiva en el gimnasio o en la piscina, así como trabajando en talleres para la cárcel o para empresas externas.
La nueva cárcel dispone de 720 celdas de 13 metros cuadrados repartidas en ocho módulos de 72 celdas cada uno y otros cuatro de 36. Además, cuenta con un edificio de enfermería con 64 camas y consultas de atención especiaizada, así como instalaciones para telediagnóstico y telemedicina, lo que supondrá una reducción de los traslados a hospitales. El Gobierno ha invertido 116 millones de euros en la obra y en el equipamiento y esta infraestructura se va a completar con otra similar en Zubieta (Gipuzkoa), cuyas obras ya han empezado, y con sendos centros de inserción en cada territorio.
En el caso de Araba, la ubicación de este centro ha generado polémica y ha dicho que su deseo es que el lugar sea pactado aunque ha opinado que "es absurdo" que todavía existan prejuicios en torno a estas infraestrcturas. De manera transitoria, el centro de inserción de Araba se ubicará en un pequeño espacio de la vieja cárcel de Nanclares.
Por otro lado, el diputado general de Araba, Javier de Andrés, presente en el acto, ha pedido un cambio en su denominación para que no se asocie al nombre del territorio y ha propuesto que lleve la acepción toponímica. Gallizo ha opinado que lo correcto es darle el nombre de la provincia pero ha manifestado su disposición a estudiar otras propuestas.
Entre los asistentes al acto han estado el delegado del Gobierno en el País Vasco, Mikel Cabieces, los consejeros vascos de Interior, Rofolfo Ares, y de Justicia, Idoia Mendia, el alcalde de Iruña de Oca, Javier Martínez, o el presidente de SIEP, Ángel Martínez San Juan. AGENCIAS