OSLO. Breivik pasó ocho horas en la isla, esposado de pies y manos y atado con una cuerda. La policía le mantuvo rodeado en todo momento para evitar que fuera visto por los habitantes de la isla, según informó el diario VG. Dos policías grabaron la reconstrucción de los hechos.

Las imagenes se utilizarán durante el juicio de Breivik, que en total mató a 77 personas el 22 de julio pues también colocó un coche bomba en Oslo que provocó ocho víctimas mortales. Seis barcas policiales y un helicóptero vigilaron el desarrollo de la investigación policial en Utoya.