lorca. El dolor y la emoción caracterizaron ayer el funeral ofrecido en memoria de cuatro de las nueve víctimas mortales del terremoto que sacudió el miércoles la ciudad murciana de Lorca. El recinto ferial de Santa Quiteria, donde también se encuentra instalado desde el pasado miércoles el principal centro de atención a los damnificados, acogió a los cerca de 3.000 personas que quisieron dar el último adiós a sus vecinos.
Los cuerpos de tres hombres y una mujer, del total de los nueve fallecidos, estuvieron presentes en esta misa, ya que las otras cinco familias, aunque algunas estaban presente en el acto, han optado por tener un funeral privado.
Durante el oficio religioso, en el que estuvieron presentes los féretros de cuatro de los nueve fallecidos, se vivieron escenas de gran emoción y dolor entre los familiares y asistentes, desolados ante una tragedia que "aún nadie se puede explicar", reconoció el obispo de Cartagena, José Manuel Lorca Planes, durante la homilía.
El obispo animó a los ciudadanos de Lorca a hacer frente a las consecuencias de este "golpe seco de la naturaleza" que generó un "escenario de angustia y lágrimas", e instó a las instituciones públicas y a las empresas privadas a apoyar "el resurgir" de este municipio.
"No es fácil encontrar el consuelo en una situación tan dramática", pero "no debemos perder la calma", añadió el prelado, quien agradeció las muestras de solidaridad llegadas desde todas las instituciones, entre las que se encuentra la del papa Benedicto XVI.
El pontífice envió un telegrama, a través del cardenal secretario de Estado del Vaticano, Tarcisio Bertone, en el que alienta "a la solidaridad con las personas en dificultad" a consecuencia del terremoto.
El obispo, que destacó la "diligencia" con la que las instituciones están gestionando la situación derivada del seísmo, advirtió de la necesidad del compromiso "de todos" para "hacer frente a las necesidades más urgentes".
"La violencia del seísmo ha creado situaciones de singular dificultad, pero Lorca volverá a su esplendor. Somos muchos los que nos sentimos a vuestro lado", animó a los familiares y a los afectados.
El acto religioso concluyó con un minuto de silencio en memoria de las víctimas, después de lo cual todos los asistentes irrumpieron en un prolongado aplauso, como último acto de homenaje a los fallecidos. Durante el funeral, al menos cuatro personas tuvieron que ser atendidas por los servicios sanitarios afectados por un ataque de ansiedad.
Mientras tanto, las tres personas que permanecían en estado grave por las heridas que sufrieron en el terremoto y que ayer continuaban ingresadas en el Hospital Virgen de la Arrixaca de Murcia evolucionan favorablemente, informó la Consejería de Sanidad.
Dos de los heridos graves son mujeres, una de ellas de 73 años, que ingresó el jueves con un síndrome coronario agudo, y otra de 36, y el tercero un niño de tres años.
La misma fuente indicó que el Servicio Murciano de Salud (SMS) ha realizado desde el temblor más de 400 asistencias sanitarias y trasladado a 70 heridos a diversos centros de la Región. Informó además de que el SMS se ha puesto en contacto con los consulados de diversos países para informar sobre el estado de salud de sus ciudadanos residentes en Lorca. >efe/e.p.
