Pamplona. La izquierda abertzale oficial conminó ayer a Aralar y EA a romper NaBai con el fin de conformar lo que denomina "un sujeto electoral unitario que dé respuesta conjunta a la demanda de cambio político y social en Navarra". Un proyecto que Batasuna plantea para los próximos comicios de 2011, "que debe ser el primer año de una nueva andadura institucional y social" en la Comunidad Foral. La declaración, leída en euskera y castellano por Xanti Kiroga y por Marine Pueyo, precisa que el acuerdo electoral que se reclama habrá de estar sustentado en "principios claros de izquierda", integrar "el acuerdo para un escenario de paz y soluciones democráticas presentado en Gernika" y comprometerse "con el proceso de articulación de Euskal Herria".

El referido acuerdo de Gernika, rubricado por Batasuna, EA, Aralar, Alternatiba y Abertzaleen Batasuna, pide a ETA que declare "un alto el fuego permanente, unilateral y verificable por la comunidad internacional", que se entenderá como "expresión de su voluntad para un definitivo abandono" de la actividad armada de la banda. Este periódico contactó ayer con las más altas instancias de Aralar y EA, que rehusaron por el momento todo pronunciamiento público sobre esta declaración de la izquierda abertzale tradicional, cuyo lema es Nafarroa XXI. Alternativa garaia (generando alternativa) y ante la que sus promotores no permitieron preguntas. Cabe recordar en todo caso que las direcciones de los dos partidos interpelados han reiterado en el pasado su apuesta por NaBai, coalición que tiene al PNV como tercer y último socio tras la reciente salida de Batzarre.

La declaración comienza aludiendo al "sueño" de la izquierda abertzale, consistente en que "el valor de la decisión libre y democrática de la ciudadanía sea absoluto; que las decisiones sobre todos los aspectos de la vida se tomen aquí, sin miedo, sin presiones; que el Estado garantice el respeto y no injerencia sobre las mismas". Acto seguido, vaticina que "Euskal Herria se encuentra en los albores de una nueva alianza social para confrontar democráticamente la negación del Estado" después de que "todas estas décadas Navarra ha sido el fortín a través del que el Estado ha pretendido coartar las ansias de libertad de nuestro pueblo".

En contraposición, la izquierda abertzale oficial considera que "las próximas elecciones forales pueden y deben convertirse en un primer paso hacia la consecución de un escenario donde todos los proyectos políticos puedan ser defendidos y materializados en igualdad de condiciones y sin injerencias externas". "Un paso para que la sociedad navarra pueda decidir libre y democráticamente su futuro", enfatiza.

En consecuencia, los promotores de la declaración dicen proclamar su compromiso "con la articulación de un planteamiento que suponga una garantía de cambio a través de la adhesión social que pueda generar", matizando que "sin ningún ánimo de protagonismo" y "asumiendo la importancia del momento político actual", aunque sin ninguna referencia explícita a ETA.