Alemania se acaba de ver envuelta en una polémica nacional con su proyecto de ley de Bienestar Animal. Su objetivo básico de evitar el sufrimiento de los animales puede acabar en la prohibición de cría de una de las razas más populares de perro en el país, el teckel, el perro salchicha alemán, y por extensión con su desaparición. Los aficionados alemanes a esta raza han protestado ante esta posibilidad. La Asociación de Criadores de Perros Alemanes también se ha manifestado en contra alegando también que puede afectar también a otras razas de perros.
En la ley impulsada por el Ministerio de Agricultura se quiere prohibir la cría indiscriminada y las prácticas en este terreno que llevan a la aparición de razas con características genéticas que provocan enfermedades degenerativas en los perros.
La polémica con los canes
En el caso de los perros salchicha alemanes, como los llaman popularmente los aficionados británicos, y cuya denominación más oficial es teckel, dackel o dachshund, perro tejonero en neerlandés, en alemán y en inglés respectivamente, sufriría de “anomalías esqueléticas” en su morfología que consisten en unas patas cortas y un cuerpo alargado que acabaría causándoles hernias, discopatías y dificultades de movimiento en edades avanzadas.
De momento, el borrador de la ley presentada plantea esta prohibición de forma general, no solo para los perros, de los que se quiere evitar los problemas respiratorios de piel en los perros braquicéfalos como el carlino, el bulldog o los bóxers, también para las mascotas sin pelo como el perro crestado chino o el gato esfinge, por ejemplo. Entre los gatos igualmente se busca acabar con los gatos sin orejas.
Criadores y aficionados protestan
Los criadores de perros han lanzado una campaña para evitar que esto suceda, para que la amenaza de desaparición ejemplificada en el teckel, un perro que apareció hace cuatro siglos con la función de cazar tejones en sus madrigueras y de ahí su especial morfología, no llegue a cumplirse. Explican que tal y como está redactada ahora es lo suficientemente vaga como para que una interpretación restrictiva prohíba la cría total de esta raza. No solo de ella, también de otras razas como el beagle, el jack russell, el cocker, el west highland, el schnauzer miniatura, el bichón maltés o el poodle toy, entre otros. “En casos extremos, cualquier perro que difiera visualmente del tipo de lobo original pronto podría estar en la lista de prohibidos en Alemania”, ha indicado la federación en un comunicado.
Por su parte, el ministro alemán de Agricultura, Özdemir Cem, ha asegurado que la iniciativa solo pretende detener a los criadores “sin escrúpulos” y no pretende “tocar” al perro salchicha. A pesar de la explicación gubernamental, la campaña de la Federación Canina de Alemania ya ha recopilado más de 22 mil firmas en contra de la prohibición, resaltando la importancia de proteger a los teckel como parte del patrimonio nacional.
Otros casos, los perros braquicéfalos
No es la primera iniciativa en este sentido que centra su atención en la cría extrema de determinadas razas. Así, hace unos meses, en Noruega se prohibió la cría de perros de las razas bulldog inglés y cavalier king charles spaniel, mientras que en Países Bajos se vetó directamente la cría de todas la razas braquicéfalas.
Los perros braquicéfalos son aquellos que tiene la cara plana y es el resultado de la intervención humana en la selección de ejemplares para la cría. Este tipo de perro muestran un hocico achatado, una nariz muy corta, sus narinas resultan muy pequeñas, el paladar es alargado y blando , presenta pliegues de piel en la cara y un notable progmatismo.
El ejemplo más extremo de este tipo de perros son los bulldogs ingleses, que presentan la mayoría de males degenerativos causado por su particular genética. Suelen presentar serios problemas respiratorios, su hocico achatado provoca que la mandíbula inferior monte sobre la superior, además los pliegues de la piel están en el origen de numerosas dermatitis y los ojos protuberantes causan problemas oculares como el ojo de cereza. Además, el tamaño de sus cabezas hace que los partos por cesárea sean más habituales y necesarios para evitar más daños a las hembras.
Un estudio comparativo del Real Colegio de Veterinarios británico concluyó que los bulldog tenían el doble de probabilidades que otras razas de sufrir uno o dos trastornos de salud al año y además una esperanza de vida menor. Por este motivo pedían a los aficionados a los perros que dejen de comprar estos perros hasta que se reconduzca la cría y se volver a un aspecto más natural y cercano al original del pastor de toros.
Además de bulldog inglés y el king charles spaniel, otras razas braquicéfalas son el shar pei el lhasa, el bulldog francés, el bóxer, el lhasa el apso, el boston terrier, el stanffordshire bull terrier, el pequinés, el carlino y el shih tzu.
