"Son tantas las llamadas que hemos hecho al 010 y al Ayuntamiento que es imposible contarlas". Así de contundentes y enfadados están los vecinos de un barrio de Vitoria, muy cansados y desesperados porque "cada pocos días estamos sin luz en la calle".
Denuncian que los cortes son continuos a lo largo del año, "con calles que se quedan a oscuras durante horas, lo que convierte al barrio en un auténtico agujero".
Este mismo martes, 5 de diciembre, vecinos de la calle Nicaragua explicaron a DNA que "volvieron a quedarse a oscuras, también en la plaza".
Un problema que se agrava en una de las zonas más longevas de la ciudad como es El Pilar, con una población envejecida.
Este barrio, como también sucede en Aranbizkarra, es un ejemplo claro donde los padres siguen viviendo en los pisos que compraron allá por la década de los años 70, pero los hijos y nietos ya hacen su vida en otros barrios de Vitoria más jóvenes como Salburua y Zabalgana.
La mayoría, jubilados
Los vecinos, la mayoría jubilados, tienen cada vez más problemas de movilidad para salir de casa, una situación que empeora por las tarde y cuando anochece porque "el 30% de los días del año se va la luz en muchas calles".
Esta es la denuncia que ha recogido DNA con testimonios de vecinas del barrio, vecinas 'de las de siempre' que superan los 70 y los 80 años de edad en muchos casos.
"Por ejemplo, este mismo lunes a la tarde hemos estado sin luz en parte de las calles Paraguay, Portal de Arriaga y Caracas", explican las afectadas.
La desesperación por los continuos cortes de luz, "sin explicación alguna cuando damos aviso a la Policía o al Ayuntamiento", ha llevado a varias vecinas a dejar de salir por la tardes porque "es imposible para nosotras cuando el barrio se queda a oscuras, la propia entrada al portal es muy difícil".
El Pilar reclama la misma atención que otros barrios
Tal y como explican a DNA, el problema se agrava en la calle Nicaragua, donde además de la oscuridad que muchos días afecta a la plaza, hay otros obstáculos que dificultan el día a día de muchas vecinas, por ejemplo de los portales 8 y 10.
"Los árboles, muchos de ellos plataneros, son tan altos que impiden llegar la luz natural a muchas casas. Sin olvidar que con las raíces hay parte de la calle que se ha quedado levantada y con agujeros".
Lo que piden es solucionar los cortes de luz que suelen afectar a varias calles de El Pilar a menudo. "Lo que queremos es que no haya diferencias entre barrios, y que El Pilar reciba la misma atención y servicios que otras zonas de Vitoria".
"El viento o la lluvia no pueden ser el motivo"
Muy enfadados de sufrir el mismo problema cada poco tiempo. Así se sienten. Están "cansados" de tener que llamar a Policía Municipal "casi todas las semanas" para quejarse de que sus calles están a oscuras, lo que les genera problemas para caminar y para hacer su vida en la calle por las tardes.
En su mayoría es gente mayor que no sale de casa cuando no hay luz en la calle por "miedo a caerse y por falta de seguridad". Y están seguros de que "el viento o la lluvia no pueden ser el motivo de los cortes".
Ya no saben a quién llamar por los continuos apagones que sufren en Nicaragua con Cofradía de Arriaga, Uruguay o Venezuela (al lado del centro de mayores).
"Pasa muy a menudo, en la calle Nicaragua con Cofradía de Arriaga nos quedamos sin luz y es imposible salir a la calle si no es con la luz del móvil", denunciaban afectados a este periódico, "cuando salimos de casa no sabemos dónde poner el pie".
El problema se agrava al ser una zona donde las raíces de los árboles han levantado las aceras, "por lo que junto a la falta de visibilidad provoca que sobre todo haya gente mayor que no salga a la calle por miedo a caerse".