MasterChef lleva años (desde 2013) triunfando en Televisión Española MasterChefen sus versiones de anónimos, de famosos y de niños. Pero el programa que presentan Pepe Rodríguez, Samantha Vallejo-Nágera y Jordi Cruz tiene un gran problema: que acaba cerca de las dos de la madrugada, con lo que son miles los espectadores que tienen que irse a dormir sin ver el programa entero y enterarse de quien abandona los fogones al día siguiente a través de la web de RTVE (si consiguen que nadie se lo desvele antes).
Su éxito es indiscutible y quizá por eso dura casi cuatro horas, para mantener unos niveles elevados de audiencia durante el prime time y el late night. Pero lo de MasterChef España es un caso peculiar: son muchísimos los países que emiten este formato, aunque la mayoría con versiones mucho más reducidas, de entre una y dos horas. Una duración mucho más asequible para el espectador medio y, sobre todo, para los muchos niños que siguen el programa, sobre todo en su versión infantil.
Radiotelevisión Española ha tomado nota de las quejas recibidas en este sentido y su presidente, José Manuel Pérez Tornero, ha anunciado este jueves en el Senado que el primer contrato sobre el talent de cocina cerrado por el nuevo Consejo de Administración "tasa el tiempo" de duración del programa, que se alarga "hasta la eternidad". "No era el caso del contrato anterior en MasterChef", ha apostillado. Por lo tanto, es probable que una vez finalice el presente MasterChef Celebrity, la siguiente edición no obligue a trasnochar tanto.
