GASTEIZ - Siempre le ha gustado madrugar, un hábito que le venía muy bien en su trabajo en Euskadi hoy. Este temporada ha cambiado de horario y de programa en Onda Vasca y desde el lunes presenta Gabon.

Ha cambiado el día por la noche, ¿cómo está viviendo esta nueva experiencia profesional?

-Un cambio enorme, llevaba muchos años madrugando, soy muy de mañana; y uno de los retos es saber si mantengo la misma energía con este horario.

El día es lo inmediato, la noche es la reflexión y usted es más de lo primero.

-Yo soy inquieta, soy muy amiga de lo inmediato, de trabajar bajo presión. El ritmo de la noche es totalmente diferente, no tiene nada que ver. Por la noche todo está ya más reposado, el tono es distinto.

¿Fue una sorpresa que la dirección de la emisora le ofreciera la noche de la radio?

-Sí, yo soy una periodista de calle, me cuesta mucho quedarme en la redacción y quienes me conocen lo saben. He hecho programas, Euskadi hoy cuando Lapitz no estaba o cuando he tenido que hacer el informativo. Hay periodistas de calle y de redacción; siempre he tirado a la calle, renunciar a ella era todo un reto para mí.

¿Qué va a hacer sin la calle?

-Traer la calle al estudio. Al principio me sorprendió porque no lo esperaba, creía que iba a seguir en mi línea. Pero enseguida me di cuenta que meter la calle en el estudio era muy interesante y que me apetecía mucho.

¿Se adaptará usted a ‘Gabon’ o irá adaptando el programa a su forma de trabajar?

-Hay que adaptarse, pero también hay que darle una vuelta al programa. Todo el mundo te dice que por la noche es un programa distinto, que todo el pescado está vendido y que lo que toca es darle una vuelta más, reflexionar.

¿Le convence esa idea?

-Yo necesito generar información, tener más; creo que va a ser distinto en el ritmo. Aunque sea de noche, quiero que Gabon sea un programa vivo, que no sea un programa que muera con la noche. Sé que el tono tiene que ser diferente, no se trata de estresar al oyente.

¿Cómo lo quiere hacer?

-Haciendo un programa que empiece a despertar nuevas inquietudes, nuevas informaciones y darle una vuelta a lo que ha pasado durante el día pero con los protagonistas de la noticia; seguir sumando, que Gabon no sea una culminación, sino una continuidad.

¿En qué cree que ha cambiado ‘Gabon’ con su llegada?

-Yo empecé el lunes y la gente que lo ha escuchado esta semana dice que tiene un toque más de magazine que de programa de política. Arrancamos con la tertulia y tratamos el tema que ha marcado la actualidad para conocer la opinión directa del protagonista de la noticia. A partir del tema del día y de haber entrado a saco en él, vamos rebajando el tono.

¿Nuevas secciones?

-Sí. Siempre he echado de menos una sección que nos permitiera contactar con el mundo en los lugares donde están ocurriendo cosas; ahora por la noche tenemos esa oportunidad, hemos abierto una red de colaboradores a lo largo del planeta y nos vamos a China, Rusia, Argentina, Nueva York, Portugal?

Un viaje sin moverse del estudio.

-Exacto, nuestros colaboradores nos cuentan qué se comenta en sus países; cómo nos ven, cuáles son sus vivencias y cómo es su día a día. Es una forma de abrirnos a otras realidades, no quedarnos solo con lo que ha pasado aquí.

¿Qué modificaciones informativas ha hecho o va a hacer?

-Actualizamos la información constantemente pero sin caer en el clásico informativo, buscamos conexiones con los diarios del Grupo Noticias para saber cómo van al cierre, estamos muy pegados a lo que se mueve en la prensa digital para conocer la última hora y también tenemos temas de cultura.

¿Qué destacaría?

-Hay mucha entrevista con los protagonistas de la noticia del día y con los actores que rigen la actualidad del momento.

Antes madrugaba mucho, ahora trasnocha bastante, ¿difícil equilibrar el descanso?

-Bueno, sigo siendo madrugadora porque procuro escuchar a Javier Vizcaíno por las mañanas, pero he conseguido dormir siete horas y eso está bien; antes nunca lo conseguía.

De ocho a doce de la noche, ¿cuatro horas muy intensas?

-De ocho a diez de la noche es la franja más informativa; es un informativo más al uso y comparto este tiempo con Itsaso Güemes, Sheila García, Alfonso Castro y en temas de cultura con Forki; después vamos al análisis y a un tono más relajado, pero sin perder el pulso de la información y el ritmo.

En ‘Euskadi hoy’ ha trabajado usted con un tono muy político, ¿lo va a echar de menos en ‘Gabon’?

-No, el curso que tenemos por delante es muy político, pero hay otras realidades, aunque también se resuelven con política. Enfrente tenemos la crisis de los refugiados, es un problema europeo gravísimo que nos va a tocar resolver porque va a llamar a la puerta de nuestra casa. La política la vamos a tratar, lo impregna todo, pero queremos que sea un tratamiento muy social, muy pegado a la calle.

¿Qué secciones de la información son las más interesantes?

-No queremos que los políticos sean los que se pronuncien siempre, tampoco decimos que no van a estar nunca, pero hay muchas realidades diferentes que interesan. Por eso, primer día de la nueva temporada de Gabon lo abrimos con el testimonio de un refugiado que vive en Euskadi.