LONDRES. En un artículo en el periódico, el consejero delegado de Google, Eric Schmidt, confirma que un equipo especializado de 200 personas ha introducido nuevos algoritmos en los motores de búsqueda para garantizar que al introducir esos términos clave no se obtengan resultados.

"Estos cambios han limpiado los resultados para unas 100.000 peticiones de búsqueda que pueden estar relacionados con el abuso sexual de menores", explica Schmidt.

El responsable de Google adelanta que, tras ser probado en el Reino Unido, el sistema de bloqueo se extenderá a otros países de habla inglesa y, en los próximos seis meses, se traducirá a otros 158 idiomas.

Microsoft, que opera Yahoo y Bing, también ha bloqueado la obtención de resultados en sus motores de búsqueda.

Paralelamente, unos 13.000 términos relacionados con el abuso sexual de menores arrojarán advertencias sobre la ilegalidad de esa actividad y ofrecerá a los usuarios el contacto de centros de ayuda.

En declaraciones al diario, el primer ministro británico, David Cameron, calificó de "avance significativo" la medida tomada por Google y Microsoft -que primero se habían negado a censurar los contenidos- y recordó que, si estas empresas "incumplen sus compromisos", introducirá legislación para obligarlas.

El pasado julio, Cameron pidió a las dos gigantes estadounidenses, que copan el 95 % del tráfico de búsquedas en internet, que redoblaran sus esfuerzos para prevenir la pornografía infantil y se aseguraran de invalidar los términos "inequívocamente" encaminados a obtener imágenes y material ilícito de menores.

Está previsto que representantes de Google y Microsoft, así como de otras empresas de internet, se reúnan hoy con Cameron en Downing Street para analizar el asunto, en la llamada Cumbre para la seguridad en internet.

Las organizaciones de protección de la infancia han alertado no obstante de que la mayoría de las imágenes de abusos de niños no se obtienen a través de búsquedas por internet sino que están en redes ocultas de pederastas.

En este sentido, Google y Microsoft han accedido a colaborar con la Agencia nacional contra el crimen británica para identificar las redes que contienen ese tipo de imágenes ilícitas.

Esta agencia ha anunciado además que trabajará con el FBI estadounidense para desmantelar las redes de pederastas que se comunican entre sí e intercambian material a través de códigos encriptados.