Vitoria. Amos Neumann, director de la productora israelí Armoza y de la versión original de la exitosa 'Homeland' ha visitado recientemente España con motivo de la jornada sobre Formatos y New Media que organiza Innova Basque Audiovisual en Bilbao siendo parte del jurado que ha elegido los mejores proyectos de la segunda edición de Innova.
Israel es un país emergente en formatos televisivos. ¿Cómo está la situación en estos momentos?
Es cierto que la televisión en Israel es emergente y además está internacionalizada. Hay muy pocas televisiones y muchas productoras que fijan la mirada en el mercado internacional.
Uno de los productos israelíes que ha triunfado en el exterior es la serie 'Homeland', un formato de su país.
Es un buen ejemplo para de alguna forma trasladar cuál podrán ser las claves de éxito de un formato para ser internacionalizado.
¿Cuales son las claves?
En los formatos de ficción, tiene que haber ciertos ingredientes, los principales son tener una buena historia y tener emoción. En el caso de Homeland -el título del formato israelí es Hatufim-, la serie original tiene muchos elementos locales pero tenía la emoción suficiente para ser clonada. También tiene una historia muy bien estructurada que podía ser trasladada de un sitio a otro.
¿Es frecuente la venta de formatos de ficción israelíes?
Hay otra serie que se está haciendo en mi país que antes de ser emitida su versión original va a ver la luz en Estados Unidos de la mano de la CBS.
¿Ha internacionalizado su productora algún formato?
Muchos. En abril de este año hemos vendido un formato de asesoramiento. El título de este programa es El gran plan. Es un espacio en el que tres abuelas dan consejos a generaciones jóvenes. Asesoran en cuestiones importantes de la vida desde su sabiduría. Este formato se ha vendido a veinte países, es una auténtica barbaridad, y estamos trabajando con otras diez posibles ventas.
¿Qué novedad supone este formato en la televisión actual?
Supone la vuelta de la gente mayor a la televisión. Durante los últimos años, hemos vivido en la creencia de que la televisión no era para la gente mayor. El éxito de determinados formatos está demostrando lo contrario. Tenemos la vuelta de la sabiduría de nuestros mayores.
¿Qué tiene más peso a la hora de concebir y producir formatos, el entretenimiento o la ficción?
Sin ninguna duda, el entretenimiento es lo que mejor se vende en los mercados internacionales.
¿Por qué es más barato?
Nosotros somos empresa productora y también distribuidora. Lo primero que hacemos es detectar qué es lo que nos demanda el cliente y siempre se repite la voz del entretenimiento. Por eso es lo que hacemos.
¿Qué es lo que más interesa al espectador de Israel?
También esta pregunta tiene una respuesta muy clara: sin duda alguna, los realities; cualquier tipo de ellos: Gran hermano, La voz, La gran carrera... Estos realities son los que más popularidad tienen en mi país.
¿Qué consumen en ficción, propia o extranjera?
En los primeros años de la irrupción de la televisión comercial en Israel se consumían series americanas y de otros países capitalistas. Los productoras descubren que los espectadores demandan consumir series de ficción en hebreo y como en Israel no se dobla, se subtitula, aprenden a hacer series ubicadas en Israel y en hebreo. Desde el año 95 o 96, en canales comerciales solo se consumen series en hebreo.
¿No se ven series americanas o de otros países ahora?
Sí, pero su nicho está en los cable operadores y tienen un share de audiencia muy bajo, entre el 1% y el 3%, mientras que los resultados de las comerciales están entre un 25% y un 30%.
¿Cuántos canales de televisión hay en Israel?
En torno a quince nacionales y una televisión pública. Igual que en el resto de países hay muchos canales extranjeros, sobre 280 o 300, pero principalmente son canales europeos.
¿Está afectando la crisis económica a la televisión de su país y las productoras?
No sé si es la crisis pero lo que es cierto es que cada vez hay menos dinero para producir. Todo el dinero que se generaba de los espacios de publicidad después se reinvertían en producción audiovisual. Todos sabemos que ese dinero no se mueve como antes, de manera tan rápida, de manera tan fácil, hay un decrecimiento de la entrada de divisas dirigidas al sector audiovisual. El 90% de este dinero va a la franja de prime time, por lo tanto, el resto, el 10% queda como algo muy residual para producir todo lo demás...
¿Eso quiere decir que también el sector audiovisual está en la cuerda floja en Israel?
Eso quiere decir que las productoras van reducido de manera muy exagerada el presupuesto que venían empleando y se está notando en todos los sentidos.
¿Qué es lo que más le gusta como espectador?
Lo que más me gusta ver es el drama, la ficción. Es bastante común entre nosotros. Hay gente que hace documentales y otros formatos de entretenimiento y les haces esta pregunta y te dicen que lo que quieren ver es ficción. No es lo mismo hacer televisión que disfrutar viéndola. Vemos otros formatos porque tenemos que estar al día de todo lo que se produce, tenemos que saber cuáles son las tendencias. Es muy distinto cuando estás en el sofá de tu casa, en esos momentos lo que quieres es relajarte.