Kia repondrá el cee'd antes de verano. El modelo que inauguró hace cuatro años la era moderna de la casa coreana va a dar paso a una generación prometedora. A las cualidades objetivas avaladas por la garantía de siete años que otorga el fabricante, el nuevo aspirante añade un diseño moderno y fascinante. La tarifa no diferirá demasiado de la actual.
Hay automóviles que, por encima de virtudes contrastadas y de posibles carencias, triunfan por su cara bonita. Cuando la estética, factor decisivo a la hora de elegir coche, queda refrendada por un aporte razonable de calidad y por una tarifa sensata, el éxito está asegurado. Por ese motivo la segunda entrega del cee'd, que debutará oficialmente en el segundo trimestre, reúne muchas papeletas para resultar agraciada con el favor del público.
En principio, el vehículo ofrece más de lo mismo. Kia no hace sino aumentar la dosis de los ingredientes que han permitido al primer cee'd competir en igualdad de condiciones con los principales automóviles compactos. Consciente de su buena sintonía con los gustos de la clase media europea, el fabricante asiático ha puesto mayor énfasis en el diseño, que gana elegancia y marca estilo en un segmento en el que proliferan los clones.
La inminente edición comienza poniendo en la calle la carrocería de cinco puertas, la más demandada del repertorio. A continuación están programados un derivado con envase familiar y otro de tres puertas. Esta primera ejecución formal asume el rostro de los últimos Kia, evoluciona los rasgos de su antecesor y presenta una figura más larga, baja y esbelta. Prolonga la longitud cinco centímetros hasta alcanzar 4,31 metros y reduce en uno la anchura (1,78 m.) y la altura (1,47 m.); la separación entre ejes es la misma (2,65 m.), lo que no deja de ser una coincidencia puesto que emplea una plataforma diferente.
Estos cambios de hechura confieren al vehículo un porte más estilizado (mejora ligeramente el coeficiente aerodinámico). También aportan ciertas connotaciones deportivas al reducir la distancia al suelo (140 mm.).
Cuatro motores. La gama del Kia cee'd va a mantener la paridad en la oferta de motorizaciones. El sucesor propondrá dos propulsores gasolina y otros dos diésel, que estarán asociados a transmisiones manual y automática de seis relaciones. La clientela, que sigue prefiriendo motores a gasóleo sin cuestionarse si el destino que les aguarda las hace o no rentables, tendrá para elegir versiones 1.4 WGT de 90 CV y 1.6 VGT de 128.
El constructor coreano prevé que la mayor parte de los pedidos del modelo se concentren en el propulsor más solvente. Se trata de una mecánica de cuatro cilindros provista de sistema de inyección directa common rail y de turbocompresor de geometría variable que garantiza un alto grado de eficiencia. A su rendimiento de potencia suma un notable valor de par, lo que denota un alto grado de elasticidad en su respuesta. Homologa un poder para acelerar de 0 a 100 km/h en 10,9 segundos y una punta de 197 km/h. Promete que su promedio de consumo de carburante no pasa de 4,1 litros cada 100 km, por lo que contendrá sus emisiones de CO2 en 109 g/km.
Completan el catálogo unidades de gasolina 1.4 MPI y 1.6 GDI, con 100 y 135 caballos respectivamente. El segundo, de inyección directa, suma potencia y buenas recuperaciones (ofrece 164 Nm de par), sin disparar el gasto: acredita una velocidad máxima de 195 km/h, una aceleración 0-100 en 9,9 segundos, un consumo medio ideal de 5,8 litros y 139 g/km de CO2. El 1.6 GDI podrá adoptar la opción de transmisión de dos embragues (DCT), que propicia una mayor eficiencia de consumo de combustible y ofrece un cambio automático de manejo suave.
La próxima remesa del cee'd incluirá también versiones EcoDynamics de menor impacto económico y medioambiental. Se vinculan tanto a motores gasolina como diésel acoplados a transmisión manual. Incorporan un dispositivo de desconexión y arranque automático del motor en las paradas (Kia lo denomina ISG), un nuevo sistema de gestión del alternador y neumáticos de baja resistencia al rodaje. La variante EcoDynamics más brillante es la diésel de 128 caballos, que se conforma oficialmente con 3,7 litros a los cien y expele tan solo 97 g/km de dióxido de carbono.