El presidente del PP, Pablo Casado, ha negado que la dirección del PP contratara a un detective para realizar labores de espionaje a la presidenta madrileña, algo que ha tildado de "absolutamente falso".

"Si alguien lo hubiera hecho, sería cesado", ha proclamado, para añadir que el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, "aceptó la dimisión" de su colaborador Ángel Carromero porque está "en la picota" y no quiere "perjudicar al Ayuntamiento de Madrid".