El Pirineo es el idílico escenario de paisajes singulares, rutas espectaculares y un turismo de naturaleza y de senderismo que no tiene parangón en el mundo.

A sus múltiples encantos naturales se le puede añadir además una atracción escalofriante para los amantes de las experiencias con grandes dosis de adrenalina y que proporciona a sus usuarios un viaje escalofriante a una velocidad vertiginosa mientras se contemplan los singulares paisajes pirenaicos que tantas veces nos dejan sin habla por su incomparable belleza.

Salida desde la plataforma. T.O.P.

La Tirolina Ordesa Pirineos permite la experiencia inolvidable de volar en la tirolina más rápida del mundo y la segunda más larga de Europa. En sus descensos han llegado a certificarse una velocidad de 189 kilómetros por hora durante sus 2.036 metros de recorrido entre la salida y la meta tras salvar un desnivel de 400 metros y un 20% de pendiente media. 

Con esas cifras, la tirolina se ha convertido en la más rápida del mundo al superar a la italiana Flying In the Sky, que ostentaba el récord anterior con 172 km/h.

Está situada en Fiscal, entre las poblaciones de Jaca y Ainsa, con unas vistas privilegiadas al Parque de Ordesa y Monte Perdido y además sus completas instalaciones incluyen aparcamiento, zona de terrazas con visualizado de salida y llegada, y subida guiada en un vehículo todo terreno durante unos 20 minutos desde las instalaciones a la plataforma de la tirolina, situada a 1.200 metros de altura, y al mirador del Pirineo y Ordesa, con sus glaciares, bosques, cañones y cimas emblemáticas.

La velocidad de vértigo es uno de sus atractivos. No todo el mundo baja por su puesto a niveles del récord, ya que este se logró en circunstancias óptimas, con personal especializado y un material avanzado.

Paracaídas de frenado durante el récord. T.O.P.

Pero un día con buenas condiciones climáticas sí se roza una velocidad de 160 kilómetros por hora mientras disfrutas de unas incomparables vistas del Pirineo.

Eso sí, tienes que agudizar al máximo tu vista y aprovechar el corto viaje, ya que dura unos 80 segundos. Tiempo suficiente para la sierra de Ordesa y de las pintorescas localidades como Sarvisé, Torlao, Buesa o Ainsa. También puedes vivir esta experiencia en pareja, siempre y cuando el peso conjunto de ambas personas no supere los 150 kilos y la diferencia de peso entre ambos no sea superior a 40 kilos.

Descenso a vista de dron. T.O.P.

Puedes grabar el vertiginoso descenso con tu teléfono móvil pero debe bajar en el bolsillo cerrado con cremallera o en la mano con alguna cuerda o elemento de sujeción. Lo mismo sucederá con las cámaras de acción, que pueden adaptarse a los cascos de seguridad que facilita la empresa para dichas cámaras.

La Tenemos una cámara de fotos de última generación para captar tus reacciones en el crucial momento de la frenada, que puedes comprar on line.

Si lo deseas, también puedes ver el descenso de tu pareja, amigo o familiar en la pantalla de la oficina, la cual está conectada con la zona de salida de la tirolina. En ella puedes ver cómo se está preparando para bajar y cuales son sus reacciones y gestos ante la inminente aventura.

Zona de llegada de la tirolina. T.O.P.

El vuelo individual cuesta 40 euros, aunque en algunas temporadas hay una oferta de 32 euros para jóvenes de 18 a 26 años.

También hay un bono familiar para 4 personas que sale a 36 euros por persona.

Esta insólita experiencia, que se realiza con unas medidas de seguridad ciertamente importantes, puede y debe ir acompañada de las visitas a los innumerables zonas de interés que ofrece toda la zona pirenaica que la rodea.

El comienzo de la aventura, a 1.200 metros de altura. T.O.P.

Desde rutas de senderismo, trekking, bicicleta de montaña, travesías de montaña, excursiones organizadas a varios puntos de interés de la zona, etc.

Todos el área dispone de una completa infraestructura de hoteles, alojamientos, hostelería y casas rurales para satisfacer las más variadas exigencias.

Y una gastronomía digna de disfrutar, sin olvidarse de los vinos del Somontano.