- La Comisión Europea (CE) considera que el repentino corte del tránsito de parte del gas ruso que fluye por territorio ucraniano hacia la Unión Europea puede tener "un impacto en parte del suministro de gas a la UE", pero que no genera "ningún problema inmediato para la seguridad de suministro". La operadora de red de transmisión de gas de Ucrania, GTSOU, anunció el pasado martes la interrupción en el tránsito en el punto de conexión de Sojranivka, en la frontera entre Rusia y Ucrania, circunstancia que calificó de "causa mayor" ante la dificultad de operar bajo la invasión rusa.
"Si bien estos acontecimientos pueden tener un impacto en parte del tránsito de gas a la UE, no generan ningún problema inmediato de seguridad de suministro para la UE", aseguró a Efe un portavoz del Ejecutivo comunitario. La Comisión, agregó el portavoz, ha sido informada por Ucrania "sobre su incapacidad para proporcionar un control operativo efectivo sobre la estación compresora de Novopskov", en el Donbás, al norte de Lugansk y bajo control de "las autoridades rusas desde principios de abril".
El corte de suministro afecta a alrededor de una cuarta parte del gas ruso que llega a la UE a través de Ucrania, es decir, unos 32,6 millones de metros cúbicos diarios. "Las autoridades ucranianas informan que desde esta estación compresora se han realizado desvíos no autorizados de gas a áreas del país controladas por Rusia. La situación actual es claramente el resultado de las acciones de la parte rusa. Ucrania ha sido un socio de tránsito fiable durante muchos años", agregó.
La autoridades ucranianas han solicitado a la gasística rusa Gazprom que canalice el tránsito de gas a través de una ruta alternativa que tenga capacidad disponible, como la de Sudzha. "Tenemos entendido que aún no se ha recibido una respuesta", señaló el portavoz comunitario, quien alabó los "esfuerzos" del personal ucraniano que trabaja "en condiciones extremadamente difíciles para mantener estable el sistema energético y garantizar que se cumplan sus obligaciones como país de tránsito a pesar de la guerra".
El corte del flujo de gas ruso hacia los países de la UE se produce después de que el pasado 27 de abril Gazprom decidiera cortar el suministro a Polonia y Bulgaria por negarse a pagar en rublos, como exige un decreto aprobado por el presidente ruso, Vladímir Putin, a finales de marzo en respuesta a las sanciones establecidas por los Veintisiete por la invasión a Ucrania.
Esa situación ha llevado a la Comisión Europea a pedir a los Estados miembros que aceleren sus planes de contingencia, si bien Bruselas dice que contaba con un "chantaje" energético de Rusia y asegura que la UE está preparada en caso de interrupción del suministro.
Además de mecanismos de solidaridad entre Estados miembros, los países de la UE han ido llenando sus reservas, que actualmente se encuentran alrededor del 37%. El objetivo del Ejecutivo comunitario es que los depósitos alcancen al menos al 80% cuando llegue el frío otoñal a Europa.
El próximo 18 de mayo se espera que la Comisión presente los detalles del plan denominado RePowerEU, que busca reducir en dos tercios de las importaciones de gas ruso en el plazo de un año con vistas a la desconexión total en 2030.
En paralelo, y tras vetar el carbón ruso a partir del mes de agosto, ahora Bruselas intenta aprobar un nuevo paquete de sanciones que prohibiría progresivamente el petróleo ruso si logra la unanimidad de los Veintisiete.
Sería a partir de 2023, aunque la UE negocia prórrogas con algunos países que se oponen al correctivo, especialmente Hungría, que ha dicho que dada su dependencia del petróleo ruso, tanto en suministro como en infraestructura, el embargo sería una "bomba nuclear" para su economía doméstica.
l Alemania. El Gobierno alemán señaló ayer que observa "muy de cerca la situación" en torno a la reducción del flujo de gas ruso que transita por Ucrania hacia la UE y aseguró que el abastecimiento en Alemania está actualmente garantizado. En una rueda de prensa ordinaria, la portavoz adjunta del Ministerio de Economía y Clima, Annika Einhorn, manifestó que la seguridad del suministro en Alemania sigue estando garantizada actualmente"
l Moldavia. Los suministros de gas ruso a Moldavia a través del territorio ucraniano no se han visto afectados por la reducción del volumen bombeado debido al cierre de una estación en el Donbás, según fuentes oficiales de Chisinau. "Los suministros de gas a Moldavia se efectúan en régimen habitual", dijo el director de la gasística Moldovagaz, Vadim Ceban, que agregó que el país no ha recibido hasta el momento advertencias ni de Moscú, ni de Kiev sobre posibles limitaciones.