La incidencia acumulada continúa subiendo en Alemania, aunque el número de contagios cayó por debajo de la cifra de ayer, según los expertos debido a que la saturación del sistema lleva a que muchas infecciones no sean registradas.
La incidencia acumulada a siete días alcanzó este sábado 1.388 nuevos contagios por cada 100.000 habitantes, según datos del Instituto Robert Koch de virología (RKI), que la cifraba ayer en 1.349 y en 1.127 hace una semana.
En las últimas 24 horas, comunicó la institución esta madrugada, se produjeron 217.815 nuevas infecciones, algo menos que la jornada anterior, cuando con 248.838 se alcanzó un nuevo máximo, aunque claramente más que hace una semana, cuando fueron 189.166.
De acuerdo con los expertos, estas cifras sólo reflejan una parte de los casos, ya que tanto los laboratorios como las Oficinas de Sanidad responsables de transmitir los datos están saturados y además muchos contagios con síntomas leves no llegan a ser registrados de cara a las estadísticas.
El ministro de Sanidad Karl Lauterbach indicó hace una semana que cuenta con que la quinta ola, vinculada a la variante ómicron, alcance su pico máximo a mediados de febrero, cuando estima que se producirán varios cientos de miles de contagios al día.
Después de eso, predijo, las restricciones podrán irse eliminando "paso a paso".
En las últimas 24 horas se produjeron además 172 muertes -frente a las 182 de hace una semana- y la tasa acumulada de ingresos hospitalarios en siete días ascendió de 5 a 5,45 por cada 100.000 habitantes.