- El ministro del Interior de Chipre, Nicos Nouris, pidió ayer a la Unión Europea (UE) “solidaridad” para abordar el flujo migratorio hacia el país, al tiempo que sugirió que los Estados miembros pueden colaborar acogiendo a migrantes de los campos de refugiados chipriotas, que están superpoblados.
“El papa Francisco mostró a la UE lo que significa la solidaridad en su reciente visita a Chipre”, resaltó Nouris. El Vaticano trasladó a 50 migrantes que vivían en campos en el país durante la visita del Papa a principios de diciembre.
Nouris destacó en declaraciones a la radio estatal chipriota que únicamente en octubre y noviembre 4.000 migrantes han llegado a Chipre, un total de 12.000 en todo 2021. Según datos de la UE, en relación a su población, Chipre recibió la mayoría de las solicitudes de asilo del bloque en 2020. La mayoría de los migrantes llegan a través de Chipre del Norte, la parte turca de la isla.
El ministro chipriota reveló que redes de tráfico de personas ganan entre 300 y 500 euros por cruzar a los migrantes a través de la Línea Verde, la zona desmilitarizada que divide la isla. Las autoridades chipriotas han construido un muro de once kilómetros en una zona de la línea de separación.
Por otro lado, guardacostas turcos rescataron ayer a 102 migrantes del mar Egeo, encontrados bien en botes de goma o en las aguas frente a las costas de las provincias occidentales de Izmir y Aydin.
Según informó la emisora NTV, los equipos del Comando de la Guardia Costera rescataron a 66 migrantes que navegaban en dos botes de goma frente a la costa del distrito de Cesme, en Izmir, donde fueron enviados a la Dirección de Gestión de la Migración de esa provincia. Los botes con los refugiados fueron empujados a aguas territoriales turcas por agentes griegos. Por otro lado, la agencia de noticias estatal Anadolu informó de otro rescate de 36 migrantes en la costa del distrito de Kusadasi de Aydin.
