Bruselas - La Comisión Europea amenaza con recurrir a los mecanismos de arbitraje para resolver las disputas con Londres sobre el pacto del brexit, aunque, como recalcó ayer, esperará hasta fin de mes para que el Gobierno británico retire la propuesta legislativa que modifica partes del acuerdo de retirada del Reino Unido de la Unión Europea.
Ayer el vicepresidente de la Comisión para Relaciones Interinstitucionales, Maros Sefcovic, instó al Reino Unido a retirar antes de final de septiembre la ley con la que quiere modificar la salvaguarda acordada para Irlanda del Norte, que, a su juicio, pone en riesgo el acuerdo de paz en la región. También advirtió de que Bruselas utilizará los mecanismos previstos en el pacto de salida para resolver disputas, si el Reino Unido sigue adelante con sus planes. El proyecto de ley de Mercado Interno, que por el momento Londres no tiene intención de retirar, prevé modificar algunas de las normas relativas a la circulación de bienes entre Irlanda del Norte y la isla de Gran Bretaña, diseñadas para poder mantener abierta la aduana entre ambas Irlandas cuando, por el brexit, el territorio británico haya quedado fuera de la unión aduanera europea.
Cuando surge una diferencia sobre la interpretación del acuerdo de retirada, se realiza una primera consulta política en el comité conjunto presidido por Sefcovic y Gove, tal y como sucedió el jueves.
Si no se encuentra una solución en un plazo máximo de tres meses desde que Londres o Bruselas notifican por escrito el punto problemático, tanto la UE como el Reino Unido pueden pedir la formación de un panel de arbitraje para que resuelva la cuestión. Cuando las controversias se refieran a asuntos relacionados con el Derecho de la Unión, el panel de arbitraje estará obligado a presentar el caso ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea para que dicte una sentencia vinculante, tanto para el panel como para el Reino Unido y el club comunitario. Si Londres o Bruselas incumplen las decisiones del panel, se podrá imponer el pago de una multa que deberá abonarse a la parte perjudicada.
En el caso de que el Reino Unido o la UE sigan sin respetar la decisión del panel, el acuerdo de retirada permite suspender de manera proporcional partes del pacto, excepto los aspectos relacionados con los derechos de los ciudadanos, o partes de otros acuerdos.
Pacto nipón-británico. Ambos gobiernos finalizaron ayer las negociaciones sobre su tratado de libre comercio, que el ejecutivo británico ha calificado de “histórico”. Este supone el primer acuerdo comercial de este tipo cerrado por Reino Unido desde que abandonó la UE. Se estima eliminar el 99% de aranceles lo que incrementará el comercio.