Teherán - El ministro iraní de Exteriores, Mohamad Yavad Zarif, exigió ayer a Europa “normalizar” las relaciones económicas con Irán para salvar el acuerdo nuclear de 2015, tras la retirada de EEUU y su imposición de sanciones. “Tienen el deber de proporcionar las condiciones para normalizar los intercambios económicos con Irán”, dijo Zarif, citado por la agencia oficial IRNA. El jefe de la diplomacia iraní subrayó que “lo importante es el resultado” de las medidas adoptadas para contrarrestar las sanciones estadounidenses, y que no es suficiente “decir lo hemos intentado pero no funcionó”.
Europa ha adoptado una serie de medidas como el llamado “estatuto de bloqueo” para proteger a sus empresas con negocios en Irán, pero estas no han impedido que las compañías abandonen el país persa.
Además, Francia, el Reino Unido y Alemania, los tres países europeos firmantes del acuerdo nuclear, han lanzado un canal especial de pagos llamado Instex, pero que todavía no se ha puesto en marcha.
Para defender el acuerdo nuclear y el Instex viajará este lunes a Teherán el ministro alemán de Exteriores, Heiko Maas, quien tiene previsto asegurar a las autoridades iraníes que Europa ha elaborado un plan para aliviar las sanciones.
La visita cobra especial relevancia debido al ultimátum dado por Irán el pasado 8 de mayo para que las otras partes del pacto (Rusia, China, Francia, el Reino Unido y Alemania) garanticen al menos las transacciones financieras con Irán y sus exportaciones de petróleo. Irán anunció ese día que suspendía la aplicación de algunos de sus compromisos nucleares -la venta de los excedentes de agua pesada y uranio- y advirtió de que dejaría de cumplir con otras obligaciones si no se atendían sus demandas, lo que ha sido criticado por Europa. “Los europeos no están en posición de criticar a Irán ni siquiera en campos no relacionados con el acuerdo nuclear”.
El ministro iraní señaló, asimismo, que las políticas de Occidente en Oriente Medio han causado “destrucción” y denunció la venta de armas a Arabia Saudí empleadas en el conflicto del Yemen. - Efe